Ya lo hicimos el año pasado con el Eurobasket y este año no podíamos ser menos. Durante los próximos cinco días os traeremos una redacción de los partidos históricos de los mundiales en los que nos florecerán muchos recuerdos y grandes momentos. El primer partido de todos es el que se enfrentaban en la final del mundial de 1990 disputada en Argentina entre dos potentes selecciones con grandes antecedentes baloncestistas, la antigua Yugoslavia y la URSS.
Las dos selecciones tuvieron un campeonato fácil hasta llegar a semifinales. Tras pasar invictos a fase de grupos y a semi-finales, la selección Yugoslava se enfrentaba frente a la siempre poderos Estados Unidos y la URSS disputaba su encuentro frente a Puerto Rico. En el primer partido, los Drazen Petrovic, Vlade Divac, Velimir Perasovic y Toni Kukoc se enfrentaban a los Alonzo Mourning, Kenny Anderson, Doug Smith o Chris Smith. Fue un durísimo encuentro en el que se disputaban la calidad de los yugoslavos frente al poderío físico de los estadounidenses, en este caso ganó la calidad con un grandísimo Drazen Petrovic como mayor artillero por 99-91. En el segundo partido, los 'boricua' dirigidos por José 'Piculin' Ortiz, Jerome Mincy y Fico López lucharon ante la poderosísima URSS con la ausencia de su mayor estrella Arvydas Sabonis por lesión. Aún así, los Oleg Meleshchenco, Viktor Berejnoi y Andrei Lopatov lograron con facilidad superar a los isleños por 82-98. Así se colaban en la final los dos finalistas de esta final del Mundial de Argentina de 1990.
La final se presentaba espectacular. Las dos selecciones mostraron durante todo el campeonato un gran baloncesto. Los Yugoslavos como conjunto eran inapelables, además de los nombres que anteriormente mencionamos, contaban con Zarco Paspalj, Zoran Savic y Zeljko Obradovic en sus filas. Tenían todas las posiciones muy bien cubiertas y un técnico con las ideas muy claras, sin duda, el equipo a batir. Por parte de los de la URSS, antes hemos comentado que no podían contar con el gran Sabonis, baja importantísima, pero a pesar de eso llegaban a la final y con mucha hambre de otro título.
El partido comenzó muy igualado, la rocosa defensa de los de la Unión Soviética no dejaba emplear ese juego rápido y contundente de los yugoslavos. Todo hasta que la pareja Drazen Petrovic y Valde Divac se puso manos a la obra en la segunda parte del encuentro. Si en la primera mitad de la final la ventaja de los yugoslavos era de 6 puntos, en el tercer cuarto aumentaba en 12 puntos. Fue el punto de inflexión de partido, desde entonces los yugoslavos no bajaron el pistón y el tempo del encuentro. Los yugoslavos ganaban el torneo mundialista que tanto tiempo andaban buscando, parecía el comienzo de una etapa de gloria de estos grandes y curtidos jugadores de baloncesto, pero solo se quedo en eso, en un parecer. Fue el comienzo de un declive de un país y de unos hermanos, hablo del quiebro de Yugoslavia y Croacia y del quiebro de una pareja hasta entonces inseparable, Drazan Petrovic y Vlade Divac.
Sin duda, por el encuentro y por el contexto histórico entre países y sus propios jugadores uno de los mundiales históricos y uno de los partidos históricos que había que mencionar.
Os dejamos con el partido para que lo puedan disfrutar:
Os dejamos con el partido para que lo puedan disfrutar: