La derrota de los Heat ante los Spurs en el tercer partido de las Finales ha dejado muchas reacciones y muchas curas de humildad. Las grandes estrellas han hablado y han entonado el mea culpa, mientras que Spoelstra se mostraba atónito ante lo presenciado.
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Lebron fue uno de los primeros en demostrar que era el gran culpable de la noche con un 7 de 21 en tiros de campo:“No puedo jugar como hoy y pretender ganar. Mis compañeros han hecho un gran trabajo y yo no he hecho mi parte. Tengo que jugar mejor porque si yo lo hago mejor todo el equipo lo hace mejor. Me estoy poniendo el peso del equipo a las espaldas, así que tengo que cumplir. No voy a echar la culpa a nadie. La asumo yo por completo por lo que hice esta noche”.
Spoelstra aseguró sentirse sorprendido por el mal juego de su equipo:“No he reconocido a mi equipo ahí fuera. Hemos tenido lo que nos hemos merecido. Ellos han jugado con mucha más energía y fuerza y muy concentrados, al contrario que nosotros”.
Dwyane Wade fue el más "grosero" y directo:“Fue una puesta en escena terrible por parte de los Miami Heat en general. Nos azotaron el en trasero. Nos patearon el culo pero bien. Si consiguieras cuatro victorias en un sólo partido, esta serie se habría terminado hoy mismo. San Antonio jugó bien durante los 48 minutos que dura el encuentro y nosotros sólo lo hicimos un rato. Cada partido de los que quedan es una victoria obligatoria para nosotros”.
Bosh se rendía a los Spurs: “Nos hemos dado un suspenso a nosotros mismo esta noche. Jugamos un paso más lento y eso es algo completamente inaceptable para este equipo”, explicó. “Los Spurs jugaron muy abiertos y tienen muchos jugadores capaces de hacer muchas cosas… Esos chicos son impresionantes. Tuvieron casi todo lo que quisieron esta noche”.
Además, fue rotundo ante la pregunta de si pensaba que LeBron James había perdido confianza en sí mismo y sus compañeros.
“Por supuesto que no. LeBron es el mejor jugador del mundo. Simplemente va a tener que jugar mejor para ganar esta serie. Todos nosotros vamos a tener que hacerlo. No creo que la confianza sea un problema”.
Tras una soberana humillación en el primer partido jugado en Texas, los Spurs podrían pagar caro la victoria. Tony Parker acabó con unas molestias físicas que parecen ser preocupantes y podrían dejarle en la estocada para el cuarto partido de las Finales.
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Tras una resonancia magnética realizada el miércoles por la mañana, el francés ha confirmado en Facebook que sufre una pequeña elongación en los músculos isquiotibiales de la pierna izquierda: “Veremos cómo me siento mañana, ¡realmente deseo jugar!“.
El base de los San Antonio Spurs tuvo que abandonar el encuentro por esta razón cuando restaban unos minutos para el final del tercer cuarto, pero poco después volvió a incorporarse a la cancha sin problemas.
Ni Parker, ni Duncan ni Ginóbili. Un jugador que fue repudiado de los Cavaliers de Lebron por "no valer" y un ex ACB se han erigido como los líderes de la victoria de los Spurs ante los Heat. Una exhibición triplista con Neal (24 puntos y 6/10 en triples) y Green (27 puntos y 7/9 en triples) a la cabeza humillando a unos Heat desahuciados y sin ideas en ataque. Lebron, con un 7 de 21 en tiros de campo, fue el más señalado, mientras que Wade y Bosh se apagaron en la segunda mitad. Solo Miller, con 15 puntos, estuvo a la altura de las circunstancias. De nuevo se volvieron a jugar cinco minutos de la "basura" en los que DeJuan Blair quiso aprovecharlos y sumó 9 puntos. 113-77 y los Spurs se ponen 2-1 en las Finales.
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Mucha más actividad texana
Tras la humillación sufrida en el último cuarto en Florida, el toque de atención y la exigencia de más agresividad por parte de Popovich surgían su efecto y en el minuto 4 los de Texas ya ganaban por 11-4 con un hiperactivo Duncan que quería resarcirse de su 3 de 13 en el segundo partido. Parker no se estampaba contra el muro de Miami, sino que buscaba y encontraba a sus compañeros. Leonard empezaba de nuevo activo en los rebotes y los Heat con un Bosh fallón desde la media distancia.
Spoelstra paraba el choque y tras la reanudación, Lebron empezaba a hacer de las suyas y encontrar pases fáciles para que Wade y Andersen desde dentro sumaran canastas fáciles y Miller, desde el exterior, bombardeara y pusiera el 15-12. A partir de ahí empezaba el momento Ginóbili. El francés se sentaba y el argentino se quedaba a los mandos de la nave. Un triple, una penetración por la derecha y un mate para acabar el primer cuarto con 7 puntos y dejando cuatro arriba a los Spurs (24-20).
La segunda unidad, clave
Con Lebron en el banquillo, los actuales campeones tardaban cinco minutos en ver canasta y los Spurs, con la segunda unidad liderada por Neal, se iban de nuevo de 7 (27-20). Sin embargo, la garra de Bosh y un triple de Norris Cole volvían a igualar la contienda (27-26, min 18). San Antonio, con un Matt Bonner entrando en la rotación y desaprovechando tiros cómodos desde el perímetro, volvía a abrir una brecha en el luminoso con un triple de Green. Con un Chalmers revolucionado y cargado de faltas, los Spurs seguían haciendo un juego fluido y rápido que Neal y Leonard se encargaban de finalizar dando la máxima diferencia hasta el momento del partido (40-30, min 21).
"Killer" Miller y final de locos
El final de segundo cuarto iba a estar marcado por unos Spurs que se dejaban llevar por la renta, perdían dos balones consecutivos y permitían a Miami hacer un parcial de 10-0 para empatar el partido a 44. Miller, de nuevo con una tremenda efectividad desde el triple, el artífice. Sin embargo, en los últimos 30 segundos, Parker enchufaba un triple en suspensión y en la última jugada, Lebron fallaba, Duncan reboteaba y se la pasaba en largo a Neal para que volviera a clavar otro triple y los de Texas se fueran 50-44 al descanso.
DATOS AL DESCANSO/ EFEMÉRIDES: Lebron 4 puntos (2/8), 6 rebotes y 4 asistencias. Wade 12 puntos, Bosh 10 y Miller 9. // Duncan 10 puntos y 7 rebotes; Parker 6 puntos y 7 asistencias y Neal 14 puntos. // 6 pérdidas Spurs, 7 Heat // 7 de 15 en triples SAS // El 61% en tiros de campo en el primer cuarto de los Spurs es el mejor porcentaje en estas finales y el mejor de toda la historia de los Playoffs (contrastando además con lo mal que estaba tirando San Antonio).
Miller se queda solo
San Antonio sacaba el rodillo a pasear para dejar prácticamente noqueados a Miami con un parcial de 16-8 en siete minutos (66-52). La segunda mitad comenzaba con unos Heat desorientados, perdiendo balones y fallando tiros relativamente sencillos. Wade y Lebron no tenían la pólvora y solo Mike Miller, con dos triples, mantenía vivos a los de Spoelstra. El ex Grizzlie no fallaba ni una, mientras que los de Popovich tenían a Danny Green una noche más inspirado desde la línea de tres y la defensa apretaba los machos para robar y correr.
Los texanos seguían a lo suyo y establecían una nueva máxima diferencia de +21 (75-54) con un Gary Neal estelar y un Leonard que secaba a Lebron y anotaba en la cara del MVP. Hasta Joseph se sumaba a la fiesta. El partido parecía totalmente roto, pero el 6 de los Heat despertaba con un triple y tres canastas más para volver a acercar a los suyos antes de iniciar el último asalto del tercer partido (78-63).
Traca final y Blair destaca en los minutos de la basura
Si había alguna esperanza de remontada, Gary Neal se encargaba de desmantelarla nada más comenzar la última contienda con dos triples bárbaros que hacían las delicias de un AT&T Center vestido de negro intimidatorio. La fiesta seguía con un Green que fusilaba y un Joseph que no quería perderse el festival. 65-94 casi humillante a falta de 9 minutos para el final.
Tanto Spoelstra como Popovich sacaban a sus segundas espadas pero la inercia de los texanos seguía siendo la misma. DeJuan Blair tenía ganas de aprovechar sus minutos y lo metía todo. Mills también tenía su canasta de gloria y McGrady sumaba buenos minutos, aunque sin anotar pese al deseo enfervorizado de la grada. La humillación sigue su transcurso. Los titulares de Florida en el banquillo con caras largas. Mucho tendrán que cambiar las cosas en el cuarto partido, que será el próximo jueves.
Lebron, maquillando sus registros
Parte de la derrota de Miami en este tercer partido podríamos atribuírsela a Lebron James, que pese a finalizar el choque con puntos, se iba con tan solo 4 al descanso y solo llevaba 13 al término del tercer cuarto. El MVP no estuvo cómodo en todo el partido, fallaba tiros de media distancia como en 2007. 2/12 hasta el último minuto y medio del tercer periodo.
Leonard tenía parte de culpa en eso, pero los tiros y cómo dejan flotar a Lebron son para hacer un verano exhaustivo para mejorar ese tiro.
Aunque terminó el choque con 15 puntos y 11 rebotes, el 7 de 21 de Lebron en tiros de campo le convierte en uno de los señalados.
Gary Neal, héroe inesperado
El nombre de Neal es conocido para aficionados de Unicaja y Barcelona, aunque pasó sin pena ni gloria por ambos clubes. Sin embargo, se está erigiendo en uno de los héroes de esta final para lso Spurs. Tras dos partidos notables saliendo desde la banca, en el tercero se ha desatado y, con puntos, incluidos seis triples, lideró a los texanos a poner el 2-1 en la eliminatoria. "Si Neal tiene la muñeca caliente se va a levantar, va tirar y la va a enchufar", palabras de Duncan, palabras mayores. Un dato: Neal metió 6 triples en 20 partidos con el Barça en 2007. En un partido de FInales de NBA lo ha igualado.
Foto: el partido de Neal
DATOS/ EFEMÉRIDES: Lebron James promediaba un 70% en los tiros de campos fuera de la pintura, pero en las finales ha bajado hasta un 30% (7 de 25). Como en 2007. //16 triples para Spurs, récord en unas Finales // Dwyane Wade supera a James Worthy (3.022) como 21º anotador de la historia de los Playoffs // De las últimas 12 finales, en 11 ocasiones el que ha ganado el tercer partido se ha llevado el anillo. Veremos si se cumple // La victoria por 36 puntos es la tercera más amplia de la historia. Los Bulls de Jordan ganaron de 42 y los Celtics de 2008 lo hicieron de 39. // Con esta victoria, el Big Three de Spurs suma 100 victorias en Playoffs. Solo el Big Three de Cooper, Abdul-Jabbar y Worthy superó esta cifra.
El segundo partido de las finales tuvo dos mini partidos. El primero, hasta el final del tercer cuarto, con el mismo guión que el primero: igualdad absoluta. Sin embargo, los triples de Allen, Miller y Chalmers desataron la locura en Miami y los Heat empezaron a poner tierra de por medio. El último cuarto, a falta de siete minutos, ya dictaba un claro ganador con un +20 para los de Florida y los dos equipos jugando con los suplentes.
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Allen con 13, Chalmers con 19, Miller con 9 y Lebron con un 17-8-7 (más tres robos y tres tapones) fueron los mejores frente a unos Spurs que vieron como Duncan se quedaba en unos malos porcentajes de tiro (3/13) y Parker en un 5 de 14. Solo Green, con 17 puntos estuvo a la altura. Debutó McGrady en unas Finales. 84-103 y la serie viaja a Texas.
El partido comenzaba con la sorpresa de Udonis Haslem en el quinteto inicial de los Heat, algo que no afectó demasiado la estrategia de los Spurs, que veían como el fusil de Green estaba cargado y el escolta respondía con tres triples en los primeros compases para liderar un parcial de 11-6 (min 4). Los de Popovich estaban frenando a Lebron en ataque gracias a Leonard, pero Dwyane Wade se multiplicaba asistiendo (acababa con tres el primer cuarto) y se mostraba agresivo entrando a canasta. Bosh colaboraba con su tiro desde media distancia y Chalmers la enchufaba de tres. Los Heat le daban la vuelta al partido (15-16) gracias a la contribución de Andersen desde el banquillo y a las pérdidas de los Spurs, que terminaban con 5 el primer cuarto (una más que en todo el primer partido de la serie). Wade, con problemas en la rodilla de nuevo, era cambiado por el factor Miller. 22-22 al término de los primeros compases. El mismo guión que el primer partido.
FotO. twitter.com/GVazquezNY
El segundo cuarto comenzaba con un parcial de 7-0 para los Heat aprovechando que los Spurs estaban dando descanso a sus estrellas. Sin embargo, no tardarían Danny Green y Gary Neal en bombardear desde el triple y darle la vuelta al marcador (32-29, minuto 15). A partir de ahí comenzaba una sucesión de canastas por parte de ambos equipos, que abandonaban la dureza en defensa y permitían tiros sencillos. Empezaba el show de Parker (10 puntos al descanso) y Ginóbili ponía la puntilla. Parecían tener controlado el tempo del partido de los Spurs, pero en los últimos minutos, con un Ray Allen inspirado, un Andersen efectivo en la pintura y un Wade en plan "Abdul-Jabbar" (12 puntos al descanso) realizando ganchos, daban ventaja a los de Florida al descanso (45-50).
NÚMEROS AL DESCANSO: Curioso dato de San Antonio: 7/9 en triples, aunque un paupérrimo 9/29 en tiros de dos. Un chico de 21 años parando a Lebron James, que se fue al descanso con 4 puntos, 1 rebote y 4 asistencias. Parker (10 puntos y 4 asistencias), Duncan (6 puntos, 6 rebotes). Andersen y Allen (7 puntos cada uno). Chalmers y Wade 10 cada uno. Sorprende que el máximo anotador era Green, con 12 (4/4 en triples). 7 pérdidas de Spurs, casi el doble que las sumadas en el primer choque (4).
LA CLAVE: La defensa de Leonard. Números al descanso del MVP.
¿Se puede meter más puntos sin tu estrella en pista que con ella? Sin duda. Esa era la tónica en San Antonio al inicio del tercer cuarto. Con un Parker aciago, precipitado e irreconocible, Popovich lo sentaba por sus errores y su exceso en el tiro. Entraba Joseph y los Spurs, con dos triples de Green y Leonard respectivamente volvían a ponerse en el partido (53-54, min 27).
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Kawai Leonard se convertía en una de las referencias en ataque de los Spurs, que sumaban con dificultades ante unos Heat que veían como Bosh volvía a ser ese anotador de su mejor etapa en Toronto. A falta de 3 minutos para el final del tercer periodo, los Spurs se estancaban en los 65 puntos y empezaba el recital de triples con Allen, Miller y Chalmers como protagonistas para dar una renda de 10 puntos (la máxima en esta final) para comenzar la última batalla del segundo partido de las Finales (65-75).
El vendaval de los de Spoelstra seguía al comenzar el último cuarto, con unos Spurs abatidos e incapaces de superar cada canasta que realizaban los locales. Allen y Miller, de nuevo desde el triple, abrían todavía más la brecha en el marcador y Lebron, imparable al contraataque, dejaban el partido visto para sentencia (67-89, min 38). Tanto era así que Popovich lo veía imposible y sacaba a Mills, Joseph, Bonner, Blair y McGrady (que debutaba por primera vez en toda su carrera en unas Finales). Los Heat aguantaban con el quinteto titular y con un Allen queriendo igualar la cifra de 53 triples de Horry en las Finales (está a a 14).
Battier quería seguir aumentando la diferencia para los de Florida mientras que en el bando texano, Joseph y Bonner maquillaban un poco el marcador para terminar con un 84-103. Miami empataba la serie con unos últimos 15 minutos brillantes, con un parcial de 40-19. El martes, tercer asalto, en San Antonio.
La jugada de la noche: Lebron coloca un tapón brutal a Splitter.
Hay jugadores que tienen una calidad indudable, pasan a la historia en la NBA y sus recuerdos son imborrables de las retinas de sus aficionados. Sin embargo, nunca ganan un anillo. Por eso McGrady fichó por los Spurs, para conquistarlo. El alero quiere ganar el anillo y retirarse.
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Esa es la información que Yahoo! Sports hace circular. El ex de los Rockets no tiene pinta que vaya a jugar en estas Finales, pero quiere formar parte del roster para conquistar el anillo y retirarse como laureado. Tras regresar de la CBA china en la que iba sobrado, T-Mac fichó en abril por los texanos.
A sus 33 años, ha disputado cuatro partidos en estos playoffs, promediando unos números casi testimoniales de 0 puntos, 1 rebotes y 0.5 asistencias en 4.3 minutos de media sobre el parquet.
Cierto es que el primer partido de los Heat fue bastante deprimente, con un Lebron James que solo tuvo la ayuda de Wade. Sin embargo, el MVP volvió a hacer un partido bárbaro, acabando con un triple-doble: 18 puntos, 18 rebotes y 10 asistencias.
Con éste, Lebron ha conseguido ya 10 triples-dobles en toda su carrera en los Playoffs, la tercera mejor cifra de la historia, empatando a la leyenda de Larry Bird, superando a Chamberlain e igualando también a Rondo. Solo tiene a Kidd y Magic por delante:
Magic Johnson, 30
Jason Kidd, 11
LeBron James, 10
Rajon Rondo, 10
Larry Bird, 10
Wilt Chamberlain, 9
Oscar Robertson, 8
Sin embargo, en el apartado de las Finales, Lebron está mucho más cerca, y anoche superó a Frazier, Cousy, Russell, Bird y Chamberlain, quedándose a cinco del gran Magic.
Tony Parker volvió a ser, una vez más, el mejor en San Antonio y permitió a los de Popovich llevarse el primer asalto de la final con un último cuarto de escándalo (12 de sus 21 puntos). Los de Spoelstra estuvieron todo el partido por delante pero el buen hacer del francés y de Duncan (20 puntos y 14 rebotes) dieron la vuelta al choque. El triple doble sobrehumano de Lebron (18+18+10) y los 17 de Wade fueron insuficientes para empatar el choque. 92-88 y 1-0 para los Spurs.
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En ningún momento de la primera mitad parecía que San Antonio se sintiera cómodo ante un abarrotado America Airlines Arena. Duncan comenzaba con un 0 de 5 y la defensa de Bosh le dejaba flotar. Dos faltas y al banquillo en ocho minutos. Parker no acababa de encontrar el "feeling" con la pista y tan solo el espíritu de Leonard y el acierto de Green mantenían a los de Popovich cerca en el marcador.
En Miami todo fluía a la perfección, y eso que Bosh estaba ausente y Wade no podía superar la defensa de Green. Lebron se encargaba de liderar al equipo en todas las facetas y de forma insultante una vez más. Las fuerzas igualadas del primer cuarto (23-24), empezaban a diferenciarse en el segundo, cuando los de Spoelstra acribillaban desde la línea exterior a los Spurs con un Miller de nuevo efectivo y un Allen que demostraba querer ganar su segundo anillo. Norris Cole se unía al festival anotador y los Heat abrían brecha con un 29-38 que obligaba a Popovich a parar el choque.
Volvía Duncan y volvían los Spurs. El 21 de Texas se convertía en una pesadilla para Bosh, que sumaba su tercera falta y regresaba al banquillo. Andersen salía para frenar a alguien tocado por el orgullo tras un 0 de 5. Empezaba a sumar y a meter de nuevo en el partido a Spurs. A partir de ahí empezaba un duelo con Wade. "Flash" cogía las riendas del equipo en el primer descanso de Lebron y se enfilaba hasta los 11 puntos con canastas rectificadas en el aire espectaculares. La mejor versión del 3 aparecía en Florida.
Leonard y Green seguían siendo importantes y Gary Neal abusaba del tiro hasta ser cambiado por Popovich. Lebron imponía su fuerza y la primera mitad se terminaba con una canasta de Duncan espectacular. 52-49 y todo por decidirse.
DATOS al descanso: Lebron se iba al descanso con números de escándalo: 10 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias (superando a Magic Johnson en la lista de anotadores en Playoffs. 11º ya). Duncan, tras el 0 de 5 inicial, se iba con 12 puntos, 9 rebotes, 3 asistencias y 2 tapones. Sorprendían los 0 rebotes de Splitter. Solo 4 pérdidas en todo el partido (dos por equipo). 19 puntos para el banquillo de Miami, 10 para el de Spurs. 50% TC Miami; 43% TC Spurs.
La segunda mitad iba a seguir el mismo guión. Los Spurs siempre por delante en el marcador y Lebron James marcando el tempo del partido. Pese a la buena defensa de Leonard, el MVP imprimía su fuerza en el poste y no fallaba. Parecía que los de Spoelstra abrían brecha con un 51-58 nada más comenzar la segunda mitad, pero los fundamentos de Duncan en la pintura impedían que se marcharan. Los Heat perdían los mismos en seis minutos que en toda la primera mitad y Ginóbili devolvía la igualdad al marcador (61-63). Era el momento de Chalmers y Ray Allen, que con dos triples consecutivos volvían a distanciar a los actuales campeones. Haslem, desde media distancia, tampoco perdonaba. Tan solo Ginóbili parecía aguantar el tipo por parte de los texanos.
El tercer cuarto terminaría con 69-72, con un Bosh muy dubitativo, un Leonard errático desde el exterior y un Wade que se iba hasta los 17 puntos con canastas brillantes. La antesala del último cuarto era la esperada. Igualdad, emoción y muchos nervios. Los errores no perdonaban.
En los momentos decisivos, las estrellas demuestran su calidad. Eso fue lo que Tony Parker decidió hacer, asumiendo el rol de líder y encabezando a los Spurs a darle la vuelta al marcador (81-78, min 41). Con Duncan en el banquillo, Splitter aportaba en la pintura y Leonard se mostraba agresivo en las penetraciones. Para los Heat, Bosh y Andersen despertaban y mantenían vivos a los suyos.
Sin embargo, los últimos siete minutos eran para las estrellas. Y ahí estaba de nuevo Tony Parker, que hizo gala de su talento para volver loca a la defensa de Miami. Con un Duncan infalible desde la línea de tiro libre, los errores de Bosh impedían acercar a Miami en el marcador y Lebron hacía lo imposible para llevar el partido a la prórroga. Parker, a falta de cinco segundos, anotaba una canasta a tabla casi imposible que sentenciaba el choque.
El primer asalto se lo llevó San Antonio gracias a un estelar Parker, un eterno Duncan y un Leonard que frenó relativamente a Lebron. El domingo, segundo asalto.
En Sentimiento AyN estamos volcados con las finales de la NBA y queremos presentar otro de los duelos más interesantes que deparará este duelo entre los Spurs y los Heat. En el puesto de escolta, Dwyane Wade y Danny Greeneserán piezas claves para que las estrellas de ambos equipos vean desahogada su función anotadora y confíen en su capacidad ofensiva para ganar el anillo. Los Spurs buscan su quinto, mientras lo de Florida buscan su tercero.
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El escolta de los Heat lleva una carrera inmaculada en la NBA. Diez años de talento, jugadas espectaculares y dos anillos en su haber. La unión con Lebron puede llevarle al Olimpo más glorioso, pero la realidad es que "Flash" ha perdido su principal virtud: el físico. Hubo un tiempo en que los muelles de Wade eran infranqueables y su capacidad anotadora era compulsiva y prácticamente imparable. Ahora, con años y partidos en sus espaldas, las rodillas le dan problemas y le impiden estar al máximo.
Wade lleva toda la temporada lidiando con un dolor que le obliga a infiltrarse y a aguantar hasta el verano para operarse o buscar alguna técnica que alargue su carrera o mine sus dolencias. Enfrente tendrá un jugador que busca ser el Wade de la época. Rápido, físico, tirador eficaz y con buena defensa. Green es joven, tiene talento y un físico portentoso. Hábil en los contraataques y letal desde el tiro exterior saliendo de un bloqueo. Tendrá la misión de defender a Wade, aunque el de los Heat sufrirá para defenderle.
Durante la temporada ha sostenido al equipo en momentos de flaqueza de Parker y Duncan con partidos superando los 20 puntos. Popovich sabe de su importancia y lo tiene valorado hasta el punto que cuando Duncan, Parker y Manu descansaban, él también lo hacía para no saturarse de partidos. En San Antonio esperan una mayor progresión de Green y que sea uno de los líderes de los próximos años en Texas.
Dos velocidades distintas. Una en decadencia y la otra en progresión. Wade vs Green. Pasado y presente. Futuro de Texas. Veremos qué nos depara este duelo de pistoleros.
