Si los Blazers están ganando partidos es gracias a la actuación de Lillard, Mathews, Aldridge y Batum. La aportación que hacen des del banquillo Claver, Price, Burton, Jefrries, Smith o Freeland son realmente escasas. Tan solo Babbit parece ser un buen sexto hombre.
Foto: nba.com |
Si los Clippers tienen el mejor banquillo, la franquicia de Oregon es la peor en anotación de su banquillo. Y lo que es todavía, si cabe, más preocupante: es la peor con una gran diferencia con el siguiente. Los suplentes solo aportan una media de 16,5 puntos por encuentro, por los 41,7 puntos del mejor banquillo de la NBA.
Una muestra de este paupérrimo compartamiento de los suplentes lo vivimos ayer. Joel Freeland presentó una tarjeta estadística realmente oscura. En 2 minutos y 37 segundos de juego el inglés no anotó ningún punto, no reboteó, no asistió, no tiró a canasta y lo único que estrenó su casillero estadístico fue una falta personal. Menos de tres minutos no es demasiado tiempo para demostrar tus cualidades, pero es que además en ese tiempo (transcurrido en el primer cuarto) Portland no anotó ni un punto mientras su rival, Milwaukee Bucks hacía 17 puntos.
Y de su mano, porque ambos entraron y salieron de la cancha al mismo tiempo, pero con peores números, Nolan Smith. Sin anotar, sin lanzar, sin asistencias, sin rebotes, pero con tres pérdidas. Otro -17 en la estadística +/- y de nuevo a calentar banquillo el resto de la jornada.
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