Las
presiones de la FIBA continúan ejerciéndose a pesar de todos los esfuerzos de
la Euroliga por detenerlas en el Tribunal de Múnich y en la UE. La máxima exponente
de estas amenazas fue la Federación Italiana de Baloncesto (FIP) que, apoyada
por el Comité Olímpico Italiano, llegó a plantear la intervención de la Serie A, si los equipos de
la Lega Basketball no firmaban con la Basketball Champions League. Según informa
La Gazzetta dello Sport, los cuatro equipos italianos de la Eurocup de Bertomeu estarían a
punto de abandonar la competición.
Reggio
Emilia, Trento, Sassari y Cantú son los
cuatro equipos que se habrían comprometido con la Eurocup, pero, según se informa,
los tres primeros ya se han desvinculado de de esta liga y el Cantú lo hará en próximo
11 de julio.
La razón
es evidente: la Basketball Champions League es una competición devaluada antes
de que haya comenzado porque solo unos pocos equipos franceses, turcos y griegos tienen
algo de nivel internacional. Ante esta situación a la FIBA no le queda más
remedio que seguir presionando y ha forzado a estos clubes italianos a firmar por la Champions
bajo la amenaza de que no podrían participar en su liga nacional, la Serie A, que está
controlada por la FIP.
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