La NBA hará oficial este lunes o a lo largo de la semana un nuevo acuerdo televisivo. Tal y como ha adelantado el Wall Street Journal, la liga ha cerrado un acuerdo con Disney (que tiene accionarado de ESPN y ABC) y Turner (TNT) para renovar derechos televisivos a cambio de unos 24.000 millones de dólares. Una barbaridad.
Foto: NBA |
Los contratos terminan la próxima temporada y el acuerdo tenía que ser inminente. ¿Qué supone este incremento sumamente elevado del contrato televisivo (será el doble y casi el triple que el actual)? Pues muy simple: que el salary cap se verá ampliamente aumentado y podremos ver contratos hasta ahora inimaginables.
El caso más entendible, a toro pasado, es el de Lebron James. La estrella de los Cavs solo firmó por dos temporadas por los de Ohio, a la espera de que los contratos se pudiesen aumentar. Así pues, los actuales contratos firmados por el máximo (como Parsons o Hayward) quedarán en migajas y serán mejorados de forma ostensible con este nuevo marco económico.
Algunos jugadores podrían llegar a cobrar hasta 29 millones de dólares, casi 8 más de lo que cobra ahora, por ejemplo, el propio Lebron. Una barbaridad que se adecua a todo lo que genera la mejor liga del mundo.
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