Este árticulo va dedicado a estos jóvenes expertos, el futuro de la selección española, para esos jugadores que sin parar de trabjar van a conseguir el sueño de muchos; va dedicado a Dani Díez, Jaime Fernández y Álex Abrines
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Desde pequeños soñaban con disputar minutos en Liga Endesa con su equipo de la niñez. Siendo aficionados de sus equipos, forjaban un futuro basado en la enseñanza y facultades del don que poseían, el talento con el balón naranja. Son tres jugadores que ya hay conseguido una consagración en sus respectivos equipos, cada uno de ellos con un roll diferente. Analicemoslos, comenzamos con el madridista Dani Díez.
El líder de la última selección española sub-20, tras realizar una fructífera campaña con Sito Alonso en San Sebastián en calidad de cedido, obtuvo la recompensa de permanecer en el equipo de Pablo Laso. Un jugador con gran proyección para el puesto de 3 llegaba a la plantilla madridista, Tremell Darden o Carlos Suárez debían de salir de la plantilla. El jugador propicio para eso fue el segundo, mermado de minutos y de su eficacia con el conjunto blanco. Desde entonces, Dani Díez obtuvo el rol del otro jugador madrileño. Con un caché menor, ha aceptado los minutos que le ofrece Pablo Laso y en partidos que van ganando con olgura, que son muchos, le da los minutos que necesita para obtener más eficacia. Un jugador que aporta mucho rebote y gran intensidad defensiva, carece en el ámbito del tiro exterior. Sus porcentajes no eran nada buenos, pero este año está progresando mucho en ese aspecto. En dos años si sigue a este ritmo de apredizaje, puede llegar a ser un buque insignia muy claro.
Por contra, Jaime Fernández a pesar de su juventud, ya se ha consolidado en el conjunto estudiantil. Lleva dos años con el roll de segundo base, y lo está cumpliendo a las mil maravillas. Este año junto a Quino Colom consagran una pareja de bases mu completa. Junto a la creatividad y la inteligencia del andorreño se une la explosividad, la transición, el mejor uno para uno y su actitud ganadora. Jugador que se estrenón en 2009 en Liga Endesa, ha estrechado relaciones con su club de infancia y ha conseguido lo que quería. Es el jugador con mayor proyección del Ramiro de Maeztu, y una vez más un base que a muy seguro en el futuro será el timón que guie a la selección española. Al igual que Dani Díez, se le achacaba la poca efectividad desde la línea de 6.75. Su explosividad y su poder de alcanzar el salto óptimo era perfecto, pero su efectividad no lo bueno que se esperaba. Con el paso del tiempo, su efectividad mejora, y su atrevimiento a lanzar desde la línea exterior es mayor, convirtiendose en una gran amenaza para cualquier defensor, ya sea especialista o no. Quizá junto a Guillem Vives el base más prometedor de los últimos tiempos.
El caso de este jugador es diferente al de los demás. Su origen baloncestístico fue en Unicaja de Málaga en el que en la temporada 2010/2011 le dieron la oportunidad de ser parte imporatante de la plantilla. Tras un verano movido con diferentes ofertas de por medio, Álex Abrines opta por irse al FC Barcelona de Xavi Pascual, sabiendo lo difícil que podría llegar a ser los minutos en la parroquia blaugrana. Una vez acoplado al ritmo de su nuevo equipo, lo minutos no llegaban y la frustración del jugador aumentaba, pero en ese mismo instante se daba el caso de diferentes lesiones en la posición de escolta, dejando al jugador mallorquín como único escolta de referencia. Obtuvo grandes minutos en Liga Endesa y en Euroliga y la promesa se comvirtió en realidad. Un jugador atlético, con gran defensa en el uno vs uno y un talento innato para lograr acciones de ventaja en ataque gracias a su inteligencia. Con todo eso, Xavi Pascual se dio cuenta que podía llegar a ser la mejor herencia de un Juan Carlos Navarro cada vez más mermado por las lesiones. Con ese contexto, este año el jugador ha obtenido el roll de segundo escolta después de Juan Carlos Navarro, compartiendo minutos junto a Papanikolaou y Brad Oleson. Este año, se ha convertido en un arma de doble filo, puesto que, la experiencia que le transmitieron a él se la está dando a otro joven y futura estrella (Mario Hezonja) y porque cada minuto que juega está demostrando su talento puro y valía.
Espero que este pequeño homenaje a estos jugadores que desde niños disfrutaban baloncesto y han tenido la oportunidad de hacerlo a gran nivel os haya dado que pensar, que el talento sin esfuerzo no sirve de nada y que las oportunidades que te da la vida hay que aprovecharlas de innmediato.
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