En una emotiva rueda de prensa el ya ex-jugador declaró:
“Siempre pensé que cuando llegase este día y dijese adiós al baloncesto sería una tragedia, pero tengo que decir que me siento orgulloso y feliz de decir que estoy contento con mi decisión. Tengo que dar gracias a Dios no sólo por ayudarme en cada día que he jugado en la NBA, sino por haber sido elegido en el draft. Cuando la gente me pregunta cuál ha sido mi mejor momento en la Liga siempre digo que salir elegido en el draft y recibir la oportunidad de parte de alguien”
Tras marcar una época en Philadelphia donde brindó sus mejores años y les llevó a una final de la NBA tras dos décadas y consiguió un premio al MVP de la temporada, abandonó la ciudad del amor fraternal en 2006 para partir a Denver. Allí junto a Melo rindió a un gran nivel, pero en su última temporada se empezaron a ver sus carencias, tras su salida de Denver partió a Detroit y posteriormente a Memphis, donde apenas duró. Para volver a su amada Philadelphia donde disputó su último partido en la NBA.
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