El destino en la NBA siempre es impredecible. Este destino ha hecho que dos amigos como Rashard Lewis y Ray Allen se reencuentren en un equipo de baloncesto, concretamente en los Miami Heat. Ambos jugadores coincidieron en los Seattle SuperSonics de la NBA desde la temporada 2003 hasta las 2007 donde hicieron de Seattle un equipo favorito en los playoffs de la NBA. Llegada la temporada 2007 la franquicia de Seattle comenzó la reconstrucción donde escogieron al número 2 de la NBA en aquella temporada que fue Kevin Durant y a su compañero con el número 5 Jeff Green.
Ray Allen marchó a los Boston Celtics completando el llamado Big Three con Kevin Garnett y Paul Pierce. Hasta la temporada 2012 que decidió fichar por los Miami Heat en busca del anillo. En el caso de Rashard Lewis, finalizó contrato con los Sonics y firmó el contrato de su vida con los Orlando Magic. Posteriormente fue traspasado desde Orlando rumbo a Washington hasta esta última temporada, donde el pasado verano fue traspasado a los Hornets en los que no llegó ni a viajar, fue cortado al día siguiente. Ya como agente libre, varios equipos se interesaron por el alero como Lakers, Clippers, Oklahoma o Miami, pero este último se llevo el gato al agua y firmó al alero durante una temporada.
Ambos jugadores se caracterizan por ser grandes tiradores. Completaron un perímetro letal en los Sonics siendo all stars durante muchas temporadas. Ahora tienen la oportunidad de volver a trabajar juntos al lado de Lebron James y Dwayne Wade. Como si fueran novatos, comienzan una nueva etapa en busca del anillo deseado.
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