El tercer y último enfrentamiento entre el Bilbao Basket y el Real Madrid tenía lugar en Miribilla, la cancha de los vascos, en partido correspondiente a la competición europea, la Euroleague. Tanto el Bilbao como el Madrid llegaban al choque con mucho en juego, en un partido clave para el futuro de los dos equipos en la competición. El partido comenzó con el Bilbao muy enchufado desde el principio, asumiendo el mando del juego gracias a un Jackson muy motivado. En las primeras posesiones, los locales arrancaron con un claro 10-0 a su favor, levantando a su público e ilusionando a todos los aficionados. El Madrid parecía desaparecido, en gran parte gracias a la intensidad del Bilbao y al efecto Miribilla, que le valía a los locales para dominar con claridad los primeros minutos de juego (14-6). Mirotic conseguía sacar 3 faltas a Hervelle, obligando al técnico local a rotar el banquillo ya en el minuto 4 de juego, dando entrada a Banic para jugar en la pintura. Laso también daba entrada a Singler por Suárez, que no había sido capaz de frenar a Mumbrú en el comienzo del partido, pero el americano se ponía con 2 personales nada más ingresar en la cancha. La ventaja empezaba a ser peligrosa para el Madrid, ya que el Bilbao se disparaba con un 2+1 de Jackson hasta el +14, con tan solo 7 minutos de partido disputados. Sin embargo, eso no frenaba al Bilbao, que continuaba machacando al Madrid a base de juego dinámico, rapidez y mentalidad ganadora (25-10). El Madrid no encontraba su sitio en el partido, mientras que el Bilbao seguía a lo suyo, y con un triple de Raúl López lograba la máxima diferencia hasta el momento (34-14), con la cual llegábamos al intermedio entre cuartos. El segundo periodo arrancaba con algunas imprecisiones, hasta que Mirotic conseguía palmear un lanzamiento de Rodríguez y abrir el marcador. El Bilbao salía algo más espeso, pero aún así el Madrid no conseguía asustar demasiado (36-17). La baja de Tomic en la zona madridista se estaba notando mucho, ya que Begic no lograba frenar a los pivots locales que, poco a poco, estaban dominando todas las acciones interiores. El propio Begic cometía una falta antideportiva sobre Mavroeidis, que volvía a poner el +20 para los suyos. El Bilbao bajaba un poco el ritmo de juego, pero mantenía la distancia, administrando sus posesiones a la perfección y obligando al Madrid a seguir borrándose a si mismo de la cancha. Mirotic cometía su tercera falta personal, con un +23 favorable al Bilbao en el marcador, lo que complicaba aún más el trabajo para Laso de cara a la segunda parte del partido. Vasileiadis anotaba un triplazo espectacular para poner en pie Miribilla, logrando la máxima diferencia en el partido a favor del Bilbao Basket (52-26), en lo que ya empezaba a ser una superioridad escandalosa, llegando al descanso con ese marcador.
Arrancaba el tercer cuarto con más problemas para el Madrid, ya que Mirotic cometía su cuarta falta personal nada más empezar. El ritmo anotador descendía, lo que favorecía al Bilbao ya que los madridistas seguían con porcentajes de tiro bastante deficientes. Vasileiadis rompía la sequía local con un triple, dejando claro que la diferencia en el marcador iba a mantenerse. Hervelle hacía su aparición en el partido, para incrementar aún más la diferencia (61-35). En el Madrid, tan solo Velickovic parecía algo entonado, logrando anotar lanzamientos y poner un poco de intensidad en la floja defensa del equipo. Tanto Fischer como Hervelle sacaban los colores a los pivots merengues, mientras que Mumbrú daba una lección de fundamentos a sus contrincantes, aumentando todavía más la ventaja de un Bilbao tremendamente superior (69-40). Velickovic hacía su partido particular, y gracias a su acierto, el Madrid reducía la distancia antes del final del tercer periodo (70-48). Singler se apuntaba a la reacción madridista, para reducir a 19 la ventaja de los locales, aunque Raúl López cerraba el periodo con un lanzamiento de dos puntos. Se llegaba al corte entre cuartos con ventaja local por 72-51.
Publicar un comentario
Déjanos tu opinión sobre lo leído.