Alucinante lo que ha conseguido Fuenlabrada en lo que llevamos de campaña. Se ha metido, ni más ni menos, que en la Copa del Rey de Barcelona 2012, dejando fuera al Valencia Basket, tras el trabajado triunfo ante Valladolid en la mañana de hoy. Un duelo en el que Saúl Blanco brilló por encima de todos, con 18 puntos, 3 rebotes, 4 asistencias y 23 de valoración. Por parte vallisoletana, el más acertado fue Hernández-Sonseca, con 12 puntos y 18 de valoración.
Fuenlabrada iba a controlar el partido desde primer momento, con un parcial tempranero de 8-0, pero que los visitantes supieron reaccionar en cierta medida, para no terminar el periodo con una ventaja demasiado alta. Aún así, Fuenlabrada acababa el primer periodo con ventaja de ocho en el luminoso (18-10).
En el segundo cuarto, los fuenlabreños iban a aumentar su ventaja. La diferencia no solo se mostraba en el marcador sino también en la pista, donde la sólida defensa local estaba secando a los visitantes, que no estaban especialmente acertados. Al descanso, ventaja clara para Fuenlabrada (34-23).
Tras el descanso, el ritmo de partido se mantenía igual. Fuenlabrada sabía que ganando estaría en la Copa, y no quiso dejar ninguna posibilidad al rival, que solo veía como el balón se movía delante de ellos, sin poder hacer nada más que mirar. Fuenlabrada se estaba marcando un partidazo y su afición así lo disfrutaba. El partido quedaba casi resuelto a falta de los últimos diez minutos (46-65).
Como reza el lema de Fuenlabrada, “Imposible más por menos”, es la sensación que se le queda a todo aficionado al baloncesto que estaba viéndolos jugar. Un equipo humilde estaba disfrutando sobre la cancha, y sobre todo ganando. Victoria que les da una clasificación a la Copa que nadie firmaba a principio de campaña. Un equipo sin patrocinador, y sin grandes estrellas, iba a luchar por el título de Copa en Barcelona. El resultado final era lo de menos, pero aún así, los Porfi Fisac se gustaban sobre la cancha, y dejaban claro que no van a Barcelona a pasearse, sino a ponerles las cosas difíciles a todos.
Fuenlabrada iba a controlar el partido desde primer momento, con un parcial tempranero de 8-0, pero que los visitantes supieron reaccionar en cierta medida, para no terminar el periodo con una ventaja demasiado alta. Aún así, Fuenlabrada acababa el primer periodo con ventaja de ocho en el luminoso (18-10).
En el segundo cuarto, los fuenlabreños iban a aumentar su ventaja. La diferencia no solo se mostraba en el marcador sino también en la pista, donde la sólida defensa local estaba secando a los visitantes, que no estaban especialmente acertados. Al descanso, ventaja clara para Fuenlabrada (34-23).
Tras el descanso, el ritmo de partido se mantenía igual. Fuenlabrada sabía que ganando estaría en la Copa, y no quiso dejar ninguna posibilidad al rival, que solo veía como el balón se movía delante de ellos, sin poder hacer nada más que mirar. Fuenlabrada se estaba marcando un partidazo y su afición así lo disfrutaba. El partido quedaba casi resuelto a falta de los últimos diez minutos (46-65).
Como reza el lema de Fuenlabrada, “Imposible más por menos”, es la sensación que se le queda a todo aficionado al baloncesto que estaba viéndolos jugar. Un equipo humilde estaba disfrutando sobre la cancha, y sobre todo ganando. Victoria que les da una clasificación a la Copa que nadie firmaba a principio de campaña. Un equipo sin patrocinador, y sin grandes estrellas, iba a luchar por el título de Copa en Barcelona. El resultado final era lo de menos, pero aún así, los Porfi Fisac se gustaban sobre la cancha, y dejaban claro que no van a Barcelona a pasearse, sino a ponerles las cosas difíciles a todos.
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