El Baloncesto León no falló en el partido que le enfrentaba al Palencia en el Palacio de los Deportes de León. Como en anteriores encuentros, el jugador dominicano del León Manny Quezada, volvió a tirar de épica para ayudar a su equipo a llevarse la victoria ante un Palencia que consiguió remontar 14 puntos en los momentos finales del partido. Finalmente la grada leonesa pudo disfrutar de la victoria de su equipo 88-87.
Desde el principio del partido, el conjunto leonés dejó claro a los palentinos que para ganar iban a necesitar sudar. El Baloncesto León confiaba en sus jugadores exteriores en la mayoría de las acciones ofensivas. Diouf respondía con un par de canastas que mantenían vivos a su equipo.
El partido era muy intenso, con defensas muy flojas por parte de ambos conjuntos, y con el Baloncesto León dominando en el marcador, pero por una ventaja mínima. El partido lo empató el Palencia en el ecuador del primer cuarto (11-11). Por desgracia para los castellanos, la igualdad en el marcador también se reflejaba en los rebotes, ya que es el punto fuerte de estos.
Por parte de los locales, TJ Durley no estaba disfrutando buenos minutos en cancha, sin embargo, si lo estaba haciendo Mortellaro que dominaba con cierta claridad en la pintura.
Gracias a un parcial de 7-3 volvían a recuperar la ventaja conseguida en los primeros minutos del partido (18-13), que más tarde se ampliaría (28-21). Incluso los leoneses llegaron a ponerse ocho puntos arriba en el marcador tras el final del primer cuarto (32-24).
En el segundo cuarto, el Palencia lograba un parcial de 2-8 para ponerse a tan solo dos puntos de los locales (34-32). A casi dos minutos para el descanso el equipo de Javier de Grado dominaba en el electrónico por diez puntos (52-42), gracias en gran parte, al acierto de los locales desde el perímetro. El Palencia pudo reducir esa ventaja antes de irse a los vestuarios (52-46).
El paso por los vestuarios fue favorable para el equipo local, que gracias a buenas acciones de Mortellaro lograba mantener a su equipo dominando en todos los aspectos del juego. Los palentinos por el contrario se precipitaban mucho en ataque, además de hacer tres faltas sin ningún sentido. Con 66-52 el Baloncesto León lograba la mayor renta en lo que iba de partido. Pero el Palencia no estaba dispuesto a tirar la toalla y con un parcial de 0-8 ponía en jaque a la grada leonesa, dejándolos a tan solo cinco puntos (70-65). El final del tercer cuarto el Baloncesto León ganaba por tan solo siete puntos 72-65).
La ventaja de los leoneses aumentaría hasta los diez puntos (79-69). Pero una antideportiva de Franco Rocchia y un par de buenas acciones de los palentinos, los cuales lograban un parcial de 0-8, conseguían ponerse a tan solo 2 puntos de los locales (79-77). Un triple de Juanjo Bernabé ponía a su equipo dos puntos arriba a falta de tan solo un minuto para el final. Swanston respondía con un lanzamiento, y Quezada, a dos segundos lograba el milagro y la victoria para el equipo leonés (88-87).
Desde el principio del partido, el conjunto leonés dejó claro a los palentinos que para ganar iban a necesitar sudar. El Baloncesto León confiaba en sus jugadores exteriores en la mayoría de las acciones ofensivas. Diouf respondía con un par de canastas que mantenían vivos a su equipo.
El partido era muy intenso, con defensas muy flojas por parte de ambos conjuntos, y con el Baloncesto León dominando en el marcador, pero por una ventaja mínima. El partido lo empató el Palencia en el ecuador del primer cuarto (11-11). Por desgracia para los castellanos, la igualdad en el marcador también se reflejaba en los rebotes, ya que es el punto fuerte de estos.
Por parte de los locales, TJ Durley no estaba disfrutando buenos minutos en cancha, sin embargo, si lo estaba haciendo Mortellaro que dominaba con cierta claridad en la pintura.
Gracias a un parcial de 7-3 volvían a recuperar la ventaja conseguida en los primeros minutos del partido (18-13), que más tarde se ampliaría (28-21). Incluso los leoneses llegaron a ponerse ocho puntos arriba en el marcador tras el final del primer cuarto (32-24).
En el segundo cuarto, el Palencia lograba un parcial de 2-8 para ponerse a tan solo dos puntos de los locales (34-32). A casi dos minutos para el descanso el equipo de Javier de Grado dominaba en el electrónico por diez puntos (52-42), gracias en gran parte, al acierto de los locales desde el perímetro. El Palencia pudo reducir esa ventaja antes de irse a los vestuarios (52-46).
El paso por los vestuarios fue favorable para el equipo local, que gracias a buenas acciones de Mortellaro lograba mantener a su equipo dominando en todos los aspectos del juego. Los palentinos por el contrario se precipitaban mucho en ataque, además de hacer tres faltas sin ningún sentido. Con 66-52 el Baloncesto León lograba la mayor renta en lo que iba de partido. Pero el Palencia no estaba dispuesto a tirar la toalla y con un parcial de 0-8 ponía en jaque a la grada leonesa, dejándolos a tan solo cinco puntos (70-65). El final del tercer cuarto el Baloncesto León ganaba por tan solo siete puntos 72-65).
La ventaja de los leoneses aumentaría hasta los diez puntos (79-69). Pero una antideportiva de Franco Rocchia y un par de buenas acciones de los palentinos, los cuales lograban un parcial de 0-8, conseguían ponerse a tan solo 2 puntos de los locales (79-77). Un triple de Juanjo Bernabé ponía a su equipo dos puntos arriba a falta de tan solo un minuto para el final. Swanston respondía con un lanzamiento, y Quezada, a dos segundos lograba el milagro y la victoria para el equipo leonés (88-87).
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