Tras la reunión mantenida este lunes en la sede central de la Euroliga en Barcelona, las reacciones al ofrecimiento de Bertomeu no dejan de sucederse. Y es que si algo ha quedado claro de esta reunión es que Bertomeu está haciendo los deberes correctamente y está atrayendo con precisión a los equipos del continente para no dejar que la Eurocup quede devaluada pese a las presiones dictatoriales de los presidente de la federaciones de Francia e Italia, que buscan que los equipos de su ámbito de influencia participen en la nueva Basketball Champions League de FIBA por imperativo legal y no por el convencimiento de una buena oferta económica sobre la mesa.
Hay que
recordar que fueron dos clubes franceses: Limoges y Estrasburgo, los que acudieron
a la reunión con Bertomeu y que, después del apoyo brindado por Parker que es el único
con la reputación suficiente en Francia para hacer frente al todo poderoso
presidente de la Federación Francesa de Baloncesto, Jean-Pierre Siutat, uno de
los grandes impulsores de la Champions, se descolgaron de esta futura liga con un comunicado en la que decían que quieren seguir participando en la Eurocup
la próxima temporada, según recogió L´Equipe en un titular lo suficientemente trasparente
como para dejar claras la posturas de quienes hasta ahora no han dicho nada,
dando la impresión de que el baloncesto en el país galo es un coto cerrado de un
único dirigente: “Copas de Europa: los clubes franceses dicen no a la FIBA”. Un
comunicado que viene de la mano de Martial Bellon, presidente del Estrasburgo, Christophe
Le Bouille, presidente de Le Mans y Gobilllot Michel, presidente de la Unión de Clubes Pro (UCPB) y Gaétan Muller, vicepresidente del ASVEL, los cuales
desafían abiertamente a Siutat pese a las sanciones que este les impondrá. Es importante hacer notar que, en una UE donde la libertad de empresa y el desarrollo económico es
fundamental, los burócratas de esta institución de carácter público se afanan
en coartar la libertad de empresa, como así lo recogió la Euroliga en su
denuncia ante Competencia, de la cual informamos en su momento.
Curiosamente
uno de los puntos fuertes del comunicado de los clubes franceses dice que optar
por la Champions supondría “un obstáculo al desarrollo de nuestros potenciales
jugadores internacionales, por lo que sería contrario a los intereses de largo
plazo de la selección de Francia.” Un punto fundamental porque contradice las
posiciones más beligerantes de la FIBA, cuyos dirigentes nunca pretendieron
crear la Champions como modelo de desarrollo de la competición o de los
jugadores, sino como liga necesaria para poder controlar las ventanas en mitad
de la temporada que necesitan para cumplir con el importante contrato con el
grupo Perform por 500 millones de euros, el cual solo afecta a las
competiciones de selecciones y no a los clubes. Por lo que necesitan un espacio
propio a mitad de temporada para concentrar a las selecciones nacionales, lo cual
supondría, entre otras cosas, que competiciones como la Copa del Rey, o las
otras copas en las otras ligas de Europa, desaparecieran.
Por su
parte, los italianos tampoco se han hecho esperar, y clubes como Reggio Emilia,
Dinamo Sassari y Aquila Basket Trento no han esperado a emitir un comunicado
mostrando sus reflexiones, sino que han pasado directamente a la ofensiva firmando
ya un contrato con la Eurocup hasta 2019. Y es que parece que los clubes italianos se han
cansado de la amenazas y coacciones del presidente de la italiana, Gianni
Petrucci, que es el paradigma de lo que está sucediendo en la FIBA, ya que se
enfrentó abiertamente a Bertomeu en el Corriere de la Sera, según informamos en
su momento, llegando a amenazar en este medio a los árbitros que pitaran para
Eurocup.
Dentro
de los nuevos matices introducidos por Bertomeu en esta última reunión están
dos fundamentales. Por un lado, se acortan los plazos para que la Euroliga
vuelva a ser más abierta, que en un principio eran de cuatro años y que ahora
pasarían a ser de dos. Es decir, el formato de dieciséis equipos solo estaría
vigente dos temporadas hasta después de la 2017-18, aunque algunas fuentes
hablan de una y, por tanto, sería después de la próxima temporada. Y por otro
lado está el dinero, ya que la propuesta FIBA no tiene garantizados ingresos,
ya que su puesta en marcha pertenece al ámbito de los Joint Venture, es decir,
los grupos de inversión conjunta, pero a diferencia
de este tipo de empresas, que se suelen poner en marcha con la aportación de
capital por parte de un grupo empresarial o un fondo de inversión, aquí no hay
nada de esto y son los clubes los que deben asumir costes y beneficios con FIBA.
Al menos Eurocup les da algo fijo, aunque sea poco, debido a que en la nueva aventura de Bertomeu, que también pertenece al ámbito de los
Joint Venture en un 45% de Euroliga y un 65% de IMG, se les garantiza algo en el
apartado de emolumentos.
Finalmente
hay que señalar que en la reunión se presentó la propuesta definitiva para la
próxima Euroliga que contará, además de con la presencia de los once equipos
con licencia A, con la presencia definitiva de los campeones de la Liga
Adriática, la BBL alemana y la VTB League, ademas del campeón de la Eurocup, y, con toda seguridad, con el Darüşşafaka
Doğuş de Estambul por invitación directa, cuyo patrocinador lo es también de la
Euroliga, y que ya ha empezado a apostar fuerte haciendo una oferta a Mindaugas
Kuzminskas por ochocientos mil euros para que forme parte de su plantilla la
temporada próxima. Sin embargo, lo más importante para los clubes franceses,
italianos y españoles es que Bertomeu también ha anunciado que en dos
temporadas la Euroliga acogerá al
campeón de la ACB, lo que, evidentemente abre las puertas a los campeones de las
ligas de Francia e Italia.
Todo un
golpe de mano dado por Bertomeu a una semana de la esperada presentación en
Paris de la publicitada, a base de desencuentros, Basketball Champions League
de la FIBA, que queda así tan devaluada como la Europe Cup de esta misma
institución. Una liga, la Europe Cup, que debe servir como soporte a la
Champions y que, a pesar de estar ya en funcionamiento, no alcanza titulares en
los periódicos y solo queda reflejada en la pagina web de la FIBA. La cual, con
el nuevo cambio de administrador, queda vetada a países como el nuestro que
encuentran muchas dificultades para acceder a "todas" sus informaciones. Y es que todo
parece indicar que, tras la no alineación de la ACB con la Champions y la
desaparición de la escena político-deportiva del anterior presidente de la FEB,
la FIBA quiere relegar a nuestro país.
A la reunión
de este lunes acudieron los siguientes equipos: Cedevita Zagreb por Croacia,
CSP Limoges y Estrasburgo por Francia, ALBA Berlín, Brose Bamberg y el Bayern Múnich
por Alemania, Aris Salónica por Grecia, Dinamo Sassari, Reggio Emilia y Trento
por Italia, Lietuvos Rytas y Neptunas Klaipeda por Lituania, Khimki Moscú por
parte de la Federación de Rusia, Estrella Roja y Partizan por parte de Serbia,
Besiktas y Galatasaray por Turquía y Gran Canaria, Unicaja y Valencia Basket por
parte de España. Además también estuvieron presentes los representantes de la Asociación
de Baloncesto del Adriático y los presidentes de ACB, la Basketball Bundesliga y la
VTB.
Fuentes:
Sportando, Eurohoops, As, Mundo Deportivo, Las Provincias, L´Equipe, Palco23. El Corriere de la Sera, La Opinión de Malaga, Superdeporte y Sentimiento A y N.
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