Por si alguno de vosotros ha estado en una cueva metido en el último mes y no ha tenido conexión a internet lo primero es poner los próximos párrafos en antecedentes.
Vía: nba.com |
Empezó el verano y DeAndre Jordan decidió
no renovar con Los Angeles Clippers y realizó un compromiso verbal con un
equipo que ya tenía atado a un jugador como Wesley Matthews, Dallas Mavericks.
Todo pintaba bien en la franquicia, con la llegada de Jordan y Matthews podían empezar a plantear un proyecto para los próximos años, pero llegó el
último día de tanteo y empezaba lo realmente importante, los días en los que
los jugadores firman sus correspondientes contratos con sus franquicias, tanto
nuevas como actuales.
Todo parecía hecho para los Mavericks
hasta que a 6 horas de que empezase el plazo oficial para la contratación de
los jugadores saltó el rumor que después se convirtió en noticia y al poco en
una “guerra”, Doc Rivers tenía planeado ir hasta Houston, donde estaba DeAndre
Jordan con su familia, a tener una reunión con él para que firmase un nuevo
contrato con los Clippers rompiendo el contrato verbal que ya tenía hecho con
los Mavs. El día iba pasando y nos fuimos enterando mediante Twitter de que
CP3, Blake Griffin o hasta el propio Paul Pierce iban a la reunión para “obligar”
a DeAndre a firmar, por parte de los Mavs fueron hacía Houston Chandler Parsons
y como no, Mark Cuban, el dueño del equipo. Las malas lenguas dicen que los
integrantes del equipo de los Clippers negaron cualquier contacto de Jordan con
algún perteneciente a la franquicia de Dallas. La finalización de todo esto fue
que finalmente el pivot acabó volviendo a la franquicia de LA y dejó en las
estacada a toda la franquicia de los Dallas Mavericks, lo cual no afectó de
manera positiva a su imagen ni a la de la franquicia a la que ahora pertenece,
Los Angeles Clippers.
Llegados a este punto, con todo el tema
de DeAndre Jordan explicado, podemos empezar con lo que en realidad nos trae
aquí hoy. Desde que esto pasó, Dallas Mavericks ha fichado a ocho hombres
interiores y se ha visto envuelto en rumores con todos los disponibles, para
intentar suplir lo que tenían pensado con la llegada de Jordan.
Poco tardaron en moverse, al poco de
producirse la no-contratación más famosa de los últimos años, Zaza Pachulia
llegaba a Dallas y en los últimos días de Julio, se hicieron con nada más y
nada menos que con cuatro ala-pivots y cuatro pivots.
La gran Summer League que hizo Maurice
Ndour con los Knicks le sirvió para ganarse un contrato como profesional, lo
propio pasó también con Jarrid Famous, Jamil Wilson y Brandon Ashley. Desde el
Draft llegó el indio Satnam Singh, Jeremy Evans como agente libre, Salah Mejri
que llegó del Real Madrid y Samuel Dalembert.
Parece que con todas las adquisiciones
hechas, sobre el papel, entre todos, pueden llegar a suplir lo que DeAndre
Jordan da a un equipo, sobre todo defensivamente.
Con Pachulia se aseguran ese trabajo
sucio bajo los aros y por lo que pudimos ver en los Bucks, un mejor jugador de
lo que todos pensábamos a estas alturas de su carrera.
Muy parecido es lo que nos demostró
Maurice Ndour en la pasada Summer League con los New York Knicks, con un
trabajo inconmensurable, encandiló a todos los espectadores y se ganó a pulso
un contrato NBA.
Tanto Singh como Mejri son un total
enigma de cara a NBA, ambos tienen una gran altura y envergadura y no hay duda
de que son un gran inconveniente para los rivales cuando pisan la zona pero, a
día de hoy, hay dudas de que vayan a dar lo que en Dallas se espera de ellos
más allá de esa faceta.
Tras el desplante de DeAndre Jordan y con
la totalidad de interiores de garantías inmediatas ya firmados por otras
franquicias, la opción de Samuel Dalembert era la mejor que quedaba para los
Mavs. Conoce la franquicia, la ciudad, y sobre todo, puede hacer de mentor de
toda la juventud que ha llegado al equipo este año en posiciones interiores. A
sus 34 años en cancha no va tener el nivel que dio hace años, ya no es tan
móvil como en sus mejores años pero sigue teniendo ese ímpetu defensivo que tantos
contratos le ha dado.
Por último, para cerrar prácticamente cerrar la plantilla, Mark Cuban consiguió otro jugador interior, JaVale McGee. Tras unos meses parado el casi total protagonista del "Shaqtin' A Fool" de los útlimos años llega a Dallas.
Si Singh y Mejri son una incognita, McGee los supera. Es capaz de lo mejor y de lo peor, con sus grandes brazos puede hacer casi lo que quiera en lo que a defensa interior se refiere pero estamos en lo de siempre, su cabeza. JaVale es otro de esos jugadores en los que su mala cabeza acaba ganando casi todas las batallas, intenta hacer cosas en pleno partido que el mismo sabe que no es capaz de hacer o simplemente, se queda mirando como transcurre el juego sin que él tenga nada que ver estando en cancha. Veremos lo que Carlise consigue de él, si lo mejor, o lo peor.
En definitiva, si me preguntan “¿crees
que los Mavs notarán tanto la ausencia de DeAndre como se podía pensar el día
que lo perdieron?” Yo me atrevería a contestar que no. Es cierto que perdieron
que perdieron a uno de los mejores centers defensivos de la liga, eso es obvio,
pero creo que con las piezas que han conseguido en las posiciones interiores el
equipo puede llegar a suplir eso. Si las lesiones les respetan, y cada uno
asume su rol dentro del vestuario, puede que entre todos lleguen a hacer que los
aficionados no echen tanto de menos algo que nunca llegaron a tener, a DeAndre
Jordan.
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