La situación para el todavía entrenador de los Knicks, Mike Woodson no es muy favorable tras perder la pasada madrugada ante Philadelphia.
Los rumores de la destitución de Woodson han sido una constante a lo largo de toda la temporada para New York. Tras la dura derrota de ayer ante los Sixers en el Madison Square Garden, Woodson declaró:
“Llevo unos 30 años en este negocio y es lo que les pasa a los entrenadores, pero no estoy centrado en eso. Estoy concentrado en tratar de salvar la temporada con 41 partidos por delante y voy a seguir pensando de esa manera. Cuando ganas partidos, las cosas están bien. Cuando pierdes, se tuercen. No me gusta exponer los problemas ni que los jugadores los aireen”.
Los Knicks llevan un record de 15-27 y ocupan la tercera plaza en la División del Atlántico con un 35,7% de victorias.
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