La noche del Draft comenzaba de la manera más imprevisible e inverosímil que nos podíamos imaginar. Si ya de por sí se auguraban sorpresa, los Cleveland Cavaliers dejaban a todo el mundo boquiabierto con la elección de Anthony Bennett en primera posición.
Ha sido tal el revuelo causado por dicha elección, que desde aquí hemos querido acercar al aficionado un poco más hacia la figura de este portentoso canadiense que puede que aún resulte desconocido por muchos.
csnwashington.com |
Como ya viene siendo habitual en el baloncesto universitario en los últimos años, la NBA llama a la puerta de estos jóvenes jugadores antes que nunca, optando la mayoría de ellos por pasar un año en 'college' en vez de completar el ciclo universitario, como muchos recomiendan, tanto por el aspecto deportivo como el educativo. Como podemos advertir por la edad de Bennett (20 años), el canadiense no era una excepción en este caso.
Pero al contrario que muchos de sus compañeros de generación, Bennett no llegó a la universidad como una estrella, ni mucho menos. Con apenas 2.00 metros de altura, el canadiense aterrizaba en UNLV como un jugador destinado a ser una de las piezas importantes dentro del conjunto dirigido por Dave Rice, sí, pero no dejaba de ser un complemento para Mike Moser y Anthony Marshall, quienes a priori eran los pilares del equipo. Sin embargo, el robusto canadiense pronto se erigiría como la pieza angular de los 'Rebels'. A pesar de no gozar de posición fija sobre el parquet, dado que hacía las veces tanto de alero como de ala-pívot, Bennett pronto se convertiría en una de las sensaciones del comienzo de campaña en la NCAA, consagrándose como uno de los mejores 'freshmen' de la nación.
Gracias a una excelente movilidad para un jugador de sus características y su contundente despliegue físico le hacían un jugador temible ante cualquier rival. Su gran primer paso de cara a encarar a canasta y su buen lanzamiento de media distancia le permitían ser ofensivamente muy productivo en todos los aspectos, ya que independientemente de que gran parte de su juego lo basa en su potencia física, la versatilidad y los fundamentos de los que goza Bennett le hicieron estar en el punto de mira de muchos 'scouts'. A esto había que añadirle su gran capacidad reboteadora en ambos lados de la cancha, donde saca provecho de su gran envergadura.
si.com |
Por otro lado, conforme la temporada avanzaba, pronto se empezarían a notar las carencias del jugador. A pesar de contar con los recursos para destacar o simplemente cumplir en este ámbito, a Bennett le hacía falta actitud para ser un buen jugador a nivel defensivo. Por otro lado, aunque su juventud puede que juegue un papel importante en este apartado, se le empezaba a criticar en ocasiones debido a su a veces cuestionable toma de decisiones, sobre todo de cara al aro, estando en ocasiones demasiado obsesionado con anotar, lo que le llevaba a forzar tal vez en exceso los tiros.
Pero afortunadamente, sus cualidades pudieron solapar sus defectos durante la temporada, y a pesar de una decepcionante eliminación en primera ronda del Torneo Final a manos de la Universidad de California y unos problemas de hombro que resultaron un quebradero de cabeza para el jugador, Bennett daría por concluida la campaña con unos promedios de 16'1 puntos, 8'1 rebotes y 1'2 tapones en poco más de 27 minutos en cancha.
Una temporada que como no podía ser de otra manera, le abría las puertas a la NBA. Aunque su posición en los diferentes 'mocks' varió con el paso del tiempo, pocos dudaban de que el hasta ahora jugador de los Rebels de UNLV fuera a ser elegido entre los 10 primeros. Sus problemas de hombro no le permitieron participar en el 'Draft Combine', lo que unido a que durante su lesión había ganado peso, se empezó a dudar tímidamente de él.
El perfil de un jugador como Bennett no es desconocido. Jugador interior que roza los 2 metros de altura, portento físicamente y cuya posición no está definida, ya que a pesar de presentar atributos para ser un alero a nivel NBA, su juego y su perfil físico andaba encaminado a la pintura. Aun teniendo que mejorar su juego de espaldas a la canasta, no cabe duda de que tiene la base.
Ahora bien, de ahí a que fuera elegido número 1 del Draft hay un trecho. Los más optimistas le colocaban como el sucesor de Larry 'Grandmama' Johnson, así como los más pesimistas le comparaban con Jason Maxiell o Brandon Bass. Bennett tiene ante sí una oportunidad inmejorable para demostrar que todos los que dudan de él se equivocan. El hecho de que los Cavaliers hayan apostado tan fuerte por él no deja de ser un voto de confianza para el canadiense, quien ha de ver en la franquicia de Ohio un lugar idóneo para desplegar su juego y mejorar a la vez que lo hace el equipo.
Welcome to the jungle!
nydailynews.com |
Publicar un comentario
Déjanos tu opinión sobre lo leído.