Foto: AGENCIA EGE |
Un irregular Bàsquet Manresa dio un nuevo paso hacia atrás en su anhelo
por mantener la categoría y cayó ampliamente derrotado ante el Unicaja
malagueño (63-80).
El equipo andaluz, que el viernes había más que cumplido en la Turkish Airlines Euroliga derrotando al Panathinaikos, pudo dosificarse bien para salir victorioso del Nou Congost y complicar un poco más el futuro a los locales.
El Bàsquet Manresa solo dominó en el inicio del partido, cuando un inspirado Josh Asselin superaba una y otra vez a la defensa malagueña con el tiro que más le gusta desde la media distancia.
El equipo andaluz, que el viernes había más que cumplido en la Turkish Airlines Euroliga derrotando al Panathinaikos, pudo dosificarse bien para salir victorioso del Nou Congost y complicar un poco más el futuro a los locales.
El Bàsquet Manresa solo dominó en el inicio del partido, cuando un inspirado Josh Asselin superaba una y otra vez a la defensa malagueña con el tiro que más le gusta desde la media distancia.
El Unicaja tardó un cuarto entero en entrar en el partido y los locales
cumplían el primer periodo con una ventaja que hacía concebir algunas
esperanzas a la sacrificada grada del Nou Congost (19-14, min. 10).
Sin embargo, los de Jasmin Repesa, con los jugadores de banquillo habituales en un segundo cuarto, aceleraron y no solo se pusieron de inmediato por delante en el marcador, sino que endosaron un casi definitivo parcial de 0-18 en siete minutos que prácticamente sentenciaba el partido (19-32, m. 17). Al descanso se llegó con una renta visitante de doce puntos (23-35).
Las cosas, sin embargo, cambiaron mucho en la reanudación. El Manresa, que se había quedado con solo 4 puntos en el segundo cuarto, anotó en el tercero un total de 31, y el Unicaja, que se relajó antes de tiempo, tuvo que afrontar los últimos diez minutos de partido con algo más de esfuerzo y consistencia de la esperada.
La vez que más cerca volvió a estar el Bàsquet Manresa de su rival fue con el 54-59 del minuto 30, pero entre Andy Panko, Zoran Dragic y Earl Calloway, devolvieron la lógica al marcador y las diferencias se estabilizaron en torno a la veintena de puntos.
Sin embargo, los de Jasmin Repesa, con los jugadores de banquillo habituales en un segundo cuarto, aceleraron y no solo se pusieron de inmediato por delante en el marcador, sino que endosaron un casi definitivo parcial de 0-18 en siete minutos que prácticamente sentenciaba el partido (19-32, m. 17). Al descanso se llegó con una renta visitante de doce puntos (23-35).
Las cosas, sin embargo, cambiaron mucho en la reanudación. El Manresa, que se había quedado con solo 4 puntos en el segundo cuarto, anotó en el tercero un total de 31, y el Unicaja, que se relajó antes de tiempo, tuvo que afrontar los últimos diez minutos de partido con algo más de esfuerzo y consistencia de la esperada.
La vez que más cerca volvió a estar el Bàsquet Manresa de su rival fue con el 54-59 del minuto 30, pero entre Andy Panko, Zoran Dragic y Earl Calloway, devolvieron la lógica al marcador y las diferencias se estabilizaron en torno a la veintena de puntos.
FUENTE: EFE