En las finales no hay favorito, tópico pero realidad y mucho más cuando enfrente está el mejor entrenador del Mundo, Zeljko Obradovic planificó el partido a la perfección y dejó a los rusos con 66 puntos (teniendo una media de 85 en Euroleague), pero Kirilenko con 17 puntos y 9 rebotes (25 de valoración) fue demasiado y el CSKA se convierte en el primer finalista.
El genio sabía que el inicio era fundamental y lo había preparado a consciencia, las cosas no podían empezar mejor para los griegos que salían en tromba y acertados cara al aro, tras 5 minutos ya llevaban 19 puntos que, unidos a una gran defensa, permitían a los de Zeljko llegar al 11-25.
Pero la calidad se tiene o no se tiene y este año en el CSKA hay mucha, en el minuto 15 Kirilenko anotaba sus primeros puntos para liderar un parcial de 13-0, que volvía la igualdad al marcador justo antes del descanso, 32-34.
En la reanudación llegó el nerviosismo a ambos lados de la cancha, los 2 equipos tenían miedo a perder y el marcador apenas variaba entre el empate y mínimas ventajas para los griegos.
Entrabamos al último minuto con 60-64 para un Panathinaikos que se precipitó mucho, fallando tiros y perdiendo rebotes, culminado con una última jugada en las que teniendo el balón para empatar o ganar no pudieron lanzar al aro, permitieron a los rusos hacerse con un billete para la final con el marcador final de 66-64.
Un dato de Optimismo para el Olympiacos o el Barça es que los 5 titulares del Cska (Tedeosic-Siskaukas-Kirilenko-Khryapa-Krstic) superaron los 25 minutos, siendo Andrei el que más estuvo en pista con 33.
El genio sabía que el inicio era fundamental y lo había preparado a consciencia, las cosas no podían empezar mejor para los griegos que salían en tromba y acertados cara al aro, tras 5 minutos ya llevaban 19 puntos que, unidos a una gran defensa, permitían a los de Zeljko llegar al 11-25.
Pero la calidad se tiene o no se tiene y este año en el CSKA hay mucha, en el minuto 15 Kirilenko anotaba sus primeros puntos para liderar un parcial de 13-0, que volvía la igualdad al marcador justo antes del descanso, 32-34.
En la reanudación llegó el nerviosismo a ambos lados de la cancha, los 2 equipos tenían miedo a perder y el marcador apenas variaba entre el empate y mínimas ventajas para los griegos.
Entrabamos al último minuto con 60-64 para un Panathinaikos que se precipitó mucho, fallando tiros y perdiendo rebotes, culminado con una última jugada en las que teniendo el balón para empatar o ganar no pudieron lanzar al aro, permitieron a los rusos hacerse con un billete para la final con el marcador final de 66-64.
Un dato de Optimismo para el Olympiacos o el Barça es que los 5 titulares del Cska (Tedeosic-Siskaukas-Kirilenko-Khryapa-Krstic) superaron los 25 minutos, siendo Andrei el que más estuvo en pista con 33.
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