Espectacular victoria del Panathinaikos en el OAKA ante el Maccabi de Tel Aviv. En el quinto partido de la serie de los cuartos de final hemos visto de todo, se ha notado mucho que había rivalidad entre estos dos equipos, el Maccabi buscó lo difícil e intentó vengarse de la pasada 'Final Four' de Barcelona dónde éste mismo equipo les ganó en una hipotética y bonita final pero los 25 puntos y 6 asistencias de uno de los mejores bases que han jugado y jugarán por Europa resultaron ser claves para la victoria del conjunto verde que ya espera al todo poderoso CSKA de Moscow en Estambul. Dar la enhorabuena al Maccabi por el juego que han desplegado en el día de hoy y durante toda su estancia este año en la Euroleague.
El partido empezó de manera muy igualada, se veía en el parquet a dos equipos que se respetaban y que se conocían después de cuatro partidos en menos de dos semanas. En el primer período los israelís vencían por dos puntos a los griegos, pero en el segundo cuarto vino la reacción del Panathinaikos liderada por los aficionados que se desplazaron en el día de hoy al OAKA, una vez más era impresionante el ambiente vivido hoy en el pabellón del equipo griego. Con un resultado de 41-32 favorable a los locales nos marchábamos a los vestuarios, el partido mucho más encarrilado para los hombres de Obradovic.
En la segunda parte dónde se esperaba que el PAOK sentenciará el partido vimos como un Maccabi daba la vuelta a la tortilla en un par de buenos minutos y igualaba el marcador gracias a la intensidad en el juego interior de el ex-Granada Richard Hendrix y del jugador zurdo exterior Ohayon quién con dos triples de manera consecutiva enmudecía al OAKA, el final del tercer cuarto estuvo marcado por las genialidades de Dimitris Diamantidis y las apariciones de gente importante en el conjunto como Jasikevicius, Batiste o Perperoglou. Nos íbamos al último cuarto con todo por decidir y un resultado de 62-53 para los locales.
Pura magia y puro arte lo que se vio en los últimos diez minutos de partido. Una vez más los jugadores de David Blatt no se dieron por muertos y pelearon hasta el final, dieron la vuelta al partido y lo volvieron a igualar, y así así hasta el final del partido, a falta de cinco segundos y con bola para los locales el conjunto israelí cometió falta sobre Diamantidis. Entonces, el resultado era de empate a 85, la "estrella" del Panathinaikos y de la selección griega metió uno de los dos tiros libres, el rebote lo capturó el Maccabi y hubo polémica ya que pudo haber una posible falta sobre Burstein, el árbitro no la vio o no la quiso pistar y Mike Batiste robo el balón y el luminoso se quedo con el 86-85.
Foto: Euroleague.net |
En la segunda parte dónde se esperaba que el PAOK sentenciará el partido vimos como un Maccabi daba la vuelta a la tortilla en un par de buenos minutos y igualaba el marcador gracias a la intensidad en el juego interior de el ex-Granada Richard Hendrix y del jugador zurdo exterior Ohayon quién con dos triples de manera consecutiva enmudecía al OAKA, el final del tercer cuarto estuvo marcado por las genialidades de Dimitris Diamantidis y las apariciones de gente importante en el conjunto como Jasikevicius, Batiste o Perperoglou. Nos íbamos al último cuarto con todo por decidir y un resultado de 62-53 para los locales.
Pura magia y puro arte lo que se vio en los últimos diez minutos de partido. Una vez más los jugadores de David Blatt no se dieron por muertos y pelearon hasta el final, dieron la vuelta al partido y lo volvieron a igualar, y así así hasta el final del partido, a falta de cinco segundos y con bola para los locales el conjunto israelí cometió falta sobre Diamantidis. Entonces, el resultado era de empate a 85, la "estrella" del Panathinaikos y de la selección griega metió uno de los dos tiros libres, el rebote lo capturó el Maccabi y hubo polémica ya que pudo haber una posible falta sobre Burstein, el árbitro no la vio o no la quiso pistar y Mike Batiste robo el balón y el luminoso se quedo con el 86-85.
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