Lejos de marcharse a otro equipo, Jose Manuel Calderón sigue ejerciendo como base de los Toronto Raptors, equipo que marcha con un record de 12 victorias por 26 derrotas, ocupando el último puesto de la Atlantic Division. Como ya publicamos en un artículo hace unas cuantas semanas, la temporada de Calderón está siendo bastante correcta en el plano individual, a pesar de las dificultades que supone jugar en un equipo sin aspiraciones de playoff, lo cual tiene también mucho mérito. Mantener un nivel aceptable partido tras partido en una plantilla corta para la NBA supone una capacidad de concentración digna de reconocer, y eso a Calderón le sobra. Con su inteligencia en la cancha, Calderón está siendo capaz de mover a su equipo, aportando en todos los aspectos del juego en los que un buen base debe aportar. Pensando en el verano, es lógico que Calderón siga mejorando, puesto que su gran objetivo debe ser llegar en un buen tono a los JJOO de Londres con la Selección Española.
Bien es cierto que en el plano anotador, Calderón muestra cierta irregularidad, intercalando partidos de grandes números con otros más discretos. Sin duda, su mejor semana anotadora fue la del 10 de febrero al 17 de febrero, donde consiguió anotaciones dignas de crack. En la victoria por 86-74 ante Boston, Calderón anotó 17 puntos, llegando dos días después con mucha confianza para jugar ante los Lakers. El día 12 de febrero, Calderón lograba anotar 30 puntos ante unos Lakers que finalmente se llevaron aquel partido por 94-92, pero sin duda quedará en el recuerdo por la espectacular actuación del base de los Raptors. Dos días después, ante New York, anotó 25, mientras que ante San Antonio y ante Charlotte logró 16 y 14 respectivamente. Una semana de ensueño para un Calderón que disputaba algunos de sus mejores partidos desde que llegó a la NBA.
A partir de ese momento, el ritmo anotador de Calderón ha ido descendiendo, manteniéndose en cifras más discretas, pero para nada malas. Ante Detroit anotó 6 puntos, pero repartió 15 asistencias (ante Memphis logró un 10/9, y ante Orlando un 8/7), dejando claro que no todo en el baloncesto es conseguir canastas. Su record personal de asistencias lo consiguió ante Washington, con un total de 17, el pasado día 3 de febrero, en un partido que además los suyos ganaron. En ese aspecto es donde realmente destaca Calderón, a la hora de repartir juego a sus compañeros. Su promedio es de 8,6 asistencias por partido, unos números que se asemejan a su trayectoria durante todos estos años, a lo que hay que sumar 10,6 puntos por partido y 3,3 rebotes, para un total de 16,21 de valoración.
En general, seguimos pensando que la temporada de Calderón entra dentro de la lógica, ejerciendo de base titular en un equipo que está lejos del nivel de los mejores, pero que dispara las posibilidades de Calderón para realizar buenas actuaciones. También seguimos pensando que Calderón podría incrementar su importancia dentro de la NBA si fichase por un equipo mejor, con mejores compañeros, donde podría desplegar todo su potencial como base y repartir juego en la dirección de los partidos. Estamos seguros de que Calderón es uno de los bases más completos de la NBA, cosa que está demostrando pero que podría demostrar mucho más en otro equipo. Aún así, su temporada es buena, algo de lo que nos alegramos puesto que los próximos JJOO requerirán del máximo nivel de todos los españoles que juegan en la liga americana.
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