
Añadido a esto, con la marcha de Gustavo Ayón y la Copa cada vez más cerca, las esperanzas de ir eran cada vez más lejanas. Con el nuevo año se unieron a la plantilla cuatro nuevos jugadores debido a la baja de Ayón y la desafortunada lesión de Sené para el resto de temporada. El que más ilusión hizo a la afición fue la vuelta de asturiano Saúl Blanco al Fernando Martín.
Y aunque parecía prácticamente improbable, consiguieron ganar a Unicaja, Valencia y Blancos de Rueda, lo que les dio una inesperada clasificación para la Copa después de 11 años. Y demostraron que no estaban ahí por casualidad, ya que lucharon hasta el último segundo para vencer el partido al futuro campeón. No pudo ser, pero su afición supo agradecerles el esfuerzo.
Queda por añadir la tremendísima temporada que están realizando en la Eurochallenge. Tan sólo han perdido dos partidos, ambos ante Ewe Basket, quedando invictos en el Last 16 y por lo tanto líderes ganando ni más ni menos que al Besiktas, candidato principal para llevarse el trofeo. Las esperanzas para llegar a la Final Four son cada vez más factibles.
Y otra sorpresa más de la temporada es el patrocinio de Mad-Croc, ya que el club llevaba dos temporadas sin uno, y los aficionados lo pedían a gritos.
El balance en liga regular es de 10 victorias ante 11 derrotas hacen que actualmente se coloquen decimosegundos a tan sólo una victoria de puestos de play-off. En un equipo en el que no cuentan las individualidades, están viviendo su mejor momento en toda la historia habiendo participado en tres competiciones simultáneamente, queda por ver si son capaces de mantener esta situación hasta final de temporada.
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