La tercera jornada del Top16 de la Euroleague nos llevaba hasta el Palacio de los Deportes de Madrid para ver el choque entre Real Madrid y Bilbao Basket, con ambos equipos jugándose su futuro en la competición y con grandes retos por delante. El Real Madrid, tras la derrota ante el Siena, no podía permitirse otro tropiezo en casa, mientras que el Bilbao quería seguir peleando por tener opciones de clasificación para cuartos de final sacando una victoria fuera de Miribilla. El partido comenzaba con intensidad, con los dos equipos produciendo en ataque (6-6, min. 3). El Madrid encontraba a Singler desde la línea de 3, pero el Bilbao mantenía la igualdad gracias a la versatilidad de Mumbrú y de Banic. Sergio Rodríguez quería hacerse con el mando del partido, aportando puntos desde el comienzo e intentando transmitir buenas sensaciones a los suyos, conocedor de la necesidad del Madrid de mandar en el juego para poder llevarse el triunfo. El Madrid se marchaba de 6 tras una canasta de Tomic, pero el Bilbao se mantenía en el choque gracias al trabajo de Mumbrú, que conseguía sacar faltas a Suárez en la pelea por el juego al poste. Sergio Rodríguez se apuntaba dos asistencias consecutivas que disparaban al Madrid hasta los 9 puntos de ventaja, obligando al técnico visitante a parar el partido para reajustar la defensa. El Bilbao daba entrada a Raúl López, que anotaba su primer lanzamiento dando aire a los suyos, pero Carroll hacía lo propio para los madridistas logrando un triple que ponía la máxima para el conjunto de Laso. Finalizaba el primer cuarto con ventaja merengue por 26-16.
El segundo cuarto empezaba con la misma intensidad, con ambos equipos anotando puntos con facilidad. Mirza Begic metía en problemas a Hervelle y Fischer, que no lograban frenar la potencia del pívot madridista, y los de Laso se marchaban 14 puntos por delante (34-20). Los visitantes mostraban algo de ansiedad en su juego, pero conseguían, gracias a Hervelle, reducir a 12 la diferencia. Los triples no entraban para los visitantes, mientras que Begic seguía haciendo daño en la zona manteniendo la ventaja de los suyos. El Madrid se plantaba en 40 puntos a falta de 5 para el descanso, evidenciado su control del ritmo de juego, y haciendo que los de Bilbao tuviesen que volver a parar el choque con un tiempo muerto. El Madrid continuaba administrando la ventaja con facilidad, anotando puntos con fluidez y obligando al Bilbao a multiplicar su juego ofensivo. Begic estaba siendo el mejor de los merengues, viendo aro con mucha facilidad e intimidando en defensa (12 puntos), mientras que Pocius se sumaba a la fiesta poniendo el +18 para el Madrid. Dos acciones consecutivas de Banic servían para que el Bilbao se pusiese a 14 puntos del Madrid, llegando el partido al descanso con 50-36 a favor de los madridistas.
Banic seguía empeñado en recortar la diferencia nada más iniciarse el tercer periodo, pero Sergio Rodríguez respondía con un triple en la siguiente acción, aunque el jugador del Bilbao iba a seguir sacando del partido a Mirotic. Los visitantes, gracias al acierto exterior de Mumbrú, lograban ponerse a 9, evidenciando su mayor concentración tras el descanso ante un Madrid algo falto de intensidad defensiva. El equipo vasco se metía de lleno en el partido, controlando el ritmo y logrando acercarse cada vez más al Madrid, que parecía haberse quedado en el vestuario. Carroll volvía a la cancha para despertar a los suyos, devolviendo el +11 al marcador, aunque Mumbrú continuaba tirando del carro visitante gracias a su trabajo bajo los aros. Al Bilbao le seguían sin entrar los triples, mientras que al Madrid si le empezaban a entrar los tiros gracias al juego de Sergio Rodríguez, que disfrutaba de nuevo sobre la pista. Los de Laso volvían a ponerse 15 puntos por delante, metiendo en problemas una vez más a los jugadores del Bilbao, que veían como su trabajo del tercer cuarto no servía para terminar de igualar el encuentro. Llull anotaba un triple para mantener la diferencia, contestado por una bandeja de Mavroeidis, finalizando el tercer cuarto con ventaja merengue por 69-55.
Raúl López anotaba de tres nada más iniciarse el último periodo. Los visitantes necesitaban anotar esos tiros para intentar remontar el partido. Los hombres de negro volvían a ponerse a 9 puntos con una canasta de Banic, iniciando el cuarto del mismo modo que el anterior. Un triple de Vasileiadis enmudecía el Palacio, poniendo al Bilbao a tan solo 6 puntos, y obligando a Laso a parar el partido una vez más. Tras el tiempo muerto, una nueva canasta de Banic seguía acercando al Bilbao, mientras que el Madrid continuaba haciendo ataques muy complicados, sin las ideas claras. El balón empezaba a quemar en las manos de algunos jugadores, y el partido entraba en una fase decisiva, en la cual Llull se apuntaba el primer tanto con un triple muy importante (74-65). Singler al contraataque devolvía los 11 de diferencia, dando oxigeno y tranquilidad al equipo madridista, que una vez más lograba escapar a la ofensiva visitante. Los jugadores visitantes cometían errores en tiros importantes, permitiendo al Madrid a jugar con el tiempo y con la ventaja, que se incrementaba gracias a otro triple de Sergio Rodríguez (83-68). El partido empezaba a estar en camino de sentencia, para finalizar con victoria madridista por 89-73, en un gran partido de Sergio Rodríguez que fue el jugador más importante en el triunfo de los suyos. El Madrid se coloca con dos victorias y una derrota, mientras que el Bilbao queda con una victoria y dos derrotas. Ahora, la segunda vuelta del grupo por delante en la lucha por llegar al playoff de cuartos de final.
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