Derrick Rose
descendía poco a poco en su lista, agradeciendo a todas y cada una de las
personas que le habían ayudado a convertirse en uno de los mejores jugadores de
la NBA, cuando miró a su derecha.
Sentada
junto a él se encontraba su madre, Brenda.
«Creo que
por fin puedo decirlo. Mamá, al final lo he conseguido», decía el sensacional
base.
Rose, la
superestrella de los Chicago Bulls y el vigente MVP de la liga, alcanzaba un
acuerdo el pasado miércoles para extender su contrato 5 años más y percibir en
total más de 94 millones de dólares.
Realmente lo
justo sería aclarar que Rose lo había conseguido (por seguir utilizando el
mismo argot del jugador) mucho antes de la rueda de prensa sobre su renovación.
La extensión no es más que otro paso en su rápido y vertiginoso ascenso que
comenzaba en un duro barrio de Chicago y que le ha llevado a convertirse en el
jugador principal del equipo de su ciudad natal.
Ha pasado de
novato del año a All-Star y de All-Star a MVP en tan sólo 3 temporadas, convirtiéndose en el jugador más joven en
ganar este premio. Por ello, la renovación más que una sorpresa constituyó una
formalidad.
Lo único que
le falta ya es un anillo, objetivo que espera alcanzar en su cuarta temporada.
«Personifica
todas las características que busques», confesaba su entrenador, Tom Thibodeau.
«Es mucho más que talento». Además también destacó del jugador su voluntad de
ganar, su inteligencia baloncestística, su falta de egoísmo y su humildad.
Cabe señalar
que los Bulls estuvieron muy cerca de ganar el campeonato la pasada campaña y
lideraron la temporada regular con 62 victorias. Lograron alcanzar las finales
de conferencia en las que salieron derrotados ante el Big Three de Miami.
La extensión
corona una temporada sensacional en la que el base ha promediado 25 puntos, 7.7
asistencias y 4.1 rebotes en 81 partidos, convirtiéndose en el único jugador
que se encuentra entre los 10 máximos anotadores y asistentes. Del mismo modo,
ha pasado a ser el quinto jugador de la historia (junto con Oscar Robertson,
John Havlicek, Michael Jordan y LeBron James) en conseguir 2000 puntos, 600
asistencias y 300 rebotes en una sola temporada.
Y lo que es
más, el base llevó a Chicago a conseguir su mejor temporada desde los años
dorados de Jordan y Pippen, transformándose, junto a MJ23, en uno de los dos
únicos jugadores de los Bulls en ganar el MVP.
A pesar de todos
sus logros, Rose sigue mejorando su juego. El año pasado intentó centrarse en
su muñeca y su tiro exterior en general durante la temporada regular y posteriormente,
pasada ya la temporada, en sus movimientos en el poste.
«Creo que no
se puede poner un tope a la progresión de Derrick» comentaba el general manager del equipo, Gar Forman.
«Da incluso miedo pensar que seguirá mejorando año tras año en su carrera».
Podría
plantearse la hipótesis de que la extensión presione al jugador. Nada más lejos
de la realidad. El jugador se la quitó toda de un plumazo diciendo que el
dinero es «lo último en lo que pienso».
A pesar de
esta última declaración, el base ya tiene algunas ideas para gastar el dinero
que le reportará su flagrante contrato.
Mencionó que
invertiría parte de él en Englewood, su antiguo barrio. Las razones principales
que Rose comentaba eran que no existen apenas pistas cubiertas ni actividades
extraescolares para los jóvenes en esta área de la ciudad.
Rose, que tan solo cuenta con 23 años, refuerza con este nuevo contrato su
gran importancia y trascendencia en la mejor liga de baloncesto del mundo.
Fuentes: NBA y vivelohoy.com
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