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Rudy Fernández es el mejor escolta español del momento, exceptuando a la “bomba” Navarro, por supuesto. Y durante el lock-out de la NBA se dispuso a jugar en el equipo más laureado del baloncesto nacional, el Real Madrid. Atrás, quedaban 3 años de jugar en unos Pórtland TrailBlazers que no le dieron manga ancha suficiente para desatar su calidad, y un traspaso a los campeones de la NBA con el final de la temporada.
El lockout y la circunstancia de tener un solo año de contrato le permitió realizar un pacto para con el Real Madrid muy favorable: los blancos disfrutaban de él mientras durase el lockout, y posteriormente, tras su paso lo que restase de temporada por la NBA, volvería al equipo blanco para cumplir lo que le restaba de contrato.
No se conocen las cláusulas del contrato en el caso de que Rudy quisiese continuar en la NBA, tras, por ejemplo, una buena temporada en minutos jugados con el equipo campeón, pero se presume que le dejan un margen para poder elegir esa posibilidad.
El día 8 de diciembre Rudy se vestía, una vez más, la camiseta blanca, contra todo pronóstico. El visado enviado por Dallas llegaba tarde, y no podía viajar a América para unirse al equipo el día 9, comienzo de la pretemporada de la NBA y fin del lockout. Tras un muy discreto partido, todavía tendría que esperar al martes 13 para salir a América, de forma que se incorporaria al equipo de Dirk Nowitzki.
Pero el mercado NBA es un tejemaneje de cambios de cromos, cómo ya hemos comentado en Guía de Cambio de Cromos. De esta manera, mientras que Dallas mandaba (o más bien dejaba ir) a Barea a los Minessota Timberwolves y despejaba el rooster para un Rudy más importante, fichaba a un veteranísimo pero aún cotizado Vince Carter y un gran Delonte West a lo largo del lunes 11. Problema. Dos jugadores para el puesto exterior, para completar un backcourt de lo más potente… y con un Rudy relegado por ser español.
El Real Madrid movía ficha, e intentaba negociar con Rudy su desvinculación con el equipo texano de la NBA. Pero a lo largo del día 13 los rumores se sucedían: Timberwolves o los mismos Celtic. El mismo Rudy comentaría lo que Gasol dijo hace un par de días, y que dan sentido a la Guía de Cambio de Cromos: Me he sentido un poco como Pau en las últimas horas, somos como cromos.
Finalmente, una operación casi por sorpresa, el entrenador George Karl (exmadridista y gran conocedor del juego europeo) le pidió para su equipo, los Denver Nuggets, que habían renovado al brasileño Nene. A las 5 de la mañana, George Kart llamaba a Rudy para pedirle que no negociase su salida al Real Madrid y se uniese a los Denver Nuggets. Que era el 6º hombre, una posición muy cotizada en la NBA, y desde luego con opciones al quinteto titular. Los Nuggets, un equipo rápido y que gusta en el contraataque son, definitivamente, el equipo de un Rudy que, por ahora, se queda en la NBA… al menos a miércoles día 14 de diciembre.
Pablo Aguado Domínguez
En twitter
@nenva20
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