Tripucka
nació el 16 de Febrero de 1959 en la pequeña, placentera y muy conocida Glen
Ridge(New Jersey), aunque creció y se crió junto a su familia en el cercano
Bloomfield, de donde era originario su padre, Frank Tripucka(de ascendencia
polaca), ex quarterback de la NFL durante muchas temporadas. Tuvo lo que se
puede decir una infancia cómoda y ajena por completo a cualquier tipo de
privación.
Asistió al
Bloomfield High School y ya desde entonces empezó a forjar su leyenda en los
playgrounds de la zona(se cuenta que se congregaban unas 500 personas para
verlo antes de su paso a la universidad). Su número 42 luce retirado y está
incluido en el All-State Bloomfield High. Fue nombrado mejor jugador del Siglo
XX de High School en New Jersey por un comité de expertos a encargo del Newark
Star Ledger.
Eligió el
prestigioso programa académico de Notre Dame para su ciclo universitario,
siguiendo los pasos de su padre antes que él. Llegó a un equipo hecho que venía
de hacer grandes temporadas, y en su año freshman los Fightings Iris jugaron la
March Madness con una parcela de gloria para el jovencísimo Tripucka. En sus 3
años siguientes, ya con un papel plenamente protagonista también jugaron la March
Madness, siendo eliminados en 1979 como sembrado nº1 de su región, por la
Michigan St. de un tal “Magic” Johnson que luego se impuso en la final a la
Indiana St. de Larry BIrd. Ese vestuario de Notre Dame incluía a futuros NBA
como Bill Laimbeer, Orlando Woolridge ó Bill Hanzlik, un equipazo universitario
en toda regla. Fue elegido para el primer equipo All-American en su último año
en Notre Dame.
Cumplió sus
cuatro años hasta graduarse, como era normal casi general en aquella época, en
1981. Se presentó al draft con un gran
cartel y fue elegido en el nº12 del draft por los entonces absolutamente
mediocres Detroit Pistons. En ese mismo draft, los Pistons tenían el nº2 con el
que escogieron a un talentoso base llamado Isiah Thomas.
Aquellos
Pistons de la 81/82, estaban carentes de talento de alto nivel y venían de ser
el peor equipo ofensivo de la liga con diferencia. Con la llegada de nuestro
protagonista(y en menor medida, su compañero de draft, Isiah Thomas),
aumentaron su producción ofensiva en ¡¡13 puntos por partido!! Y alcanzaron un
decente record de 39-43, que aunque no les alcanzó para llegar a playoffs, dejó
la impresión de haber hecho 2 grandes adiciones a la plantilla vía draft.
Encima, antes de la fecha límite de traspasos, consiguieron vía trade a un
center blanco y duro de nombre Bill Laimbeer. La temporada de Tripucka había
sido tan impactante que fue llamado al
All-Star en sustitución del lesionado ala-pívot de los Hawks, Dan
Roundfield.
Pese a la
mejora del equipo, a unos promedios como rookie de 21’6pts-5’4reb-3’3asist con
casi un 50% en Tiros de Campo, y a ser All-Star, Tripucka perdió, en una muy
apretada carrera entonces, el premio a Rookie del Año a manos del enorme Buck
Williams(del que ya les hablé aquí).
Una cosa que
si les diré de Tripucka, su juego fue invariable durante toda su carrera. No lo
interpreten como una falta de ética de trabajo, simplemente que lo que
funcionaba no debía ser cambiado(vamos, dicho yo que pensaría eso).
Tripucka era
un alero de manual para la época. Su juego se basaba principalmente en su gran
habilidad y extraordinario acierto en el
tiro de 5-6 metros, pese a todo era poseedor de unos buenos fundamentos que le
permitían realizar movimientos sencillos pero efectivos, que aprovechaba para
acercarse más a la canasta e intentar la conversión. Uno de estos movimientos
era recibir al poste bajo donde ejecutaba un tiro en salto a la media vuelta
con bastante efectividad. Precisamente el completar su tiro con un juego más de
contacto le llevaba a forzar un buen número de Tiros Libres(que convertía
bastante por encima del 80%). Su manejo de balón era aceptable y suficiente,
pero no era un jugador capaz de irse en dribbing en el 1 contra1. Era un
jugador esforzado y un gran competidor, pero al no ser rápido ni poseer un
desplazamiento lateral efectivo, la defensa no era su fuerte. Siendo un excelso
tirador, nunca pecó de abusivo, siendo perfectamente capaz de pasar la bola y
asistir a sus compañeros. Poseía un físico de muchas horas de gimnasio para
compensar su falta de altura para los estándares de entonces. Siempre me ha
parecido que tiene un mérito brutal, el haber estado en un época en la que
abundaban las estrellas en el puesto de alero (Larry Bird, Julius Erving, Adrian
Dantley, Alex English, Bernard King, Dominique Wilkins, Kiki Vandeweghe,
Marques Johnson, Jamaal Wilkes, etc…)y en inferioridad de talento y físico, fue
capaz de plantar cara con carácter.
Su 2ª
temporada en la liga confirmó lo apuntado en su año rookie. Se fue a unos increíbles promedios de
26’5pts-4’6reb-4’1asist con un 49% en Tiros de Campo. Fue 3º en el tabla de
anotadores, sólo por detrás de la pareja de aleros de los Nuggets, Alex English
y Kiki Vandeweghe. No obstante, la mala suerte se cebó con él en forma de
lesión en Diciembre y Enero, lo cual hizo que los entrenadores elegieran otros
candidatos para el All-Star, que hubiera merecido sin duda. Como equipo
siguieron la estela del año anterior. Record ligeramente por debajo del 50% de
victorias-derrotas y sin clasificación para playoffs. No obstante confirmaron
el excelente juego ofensivo del equipo, siendo de los más vistosos de la
competición. Como anécdota, el 29 de
Enero de 1983, Tripucka se fue a los 56 pts en un partido contra los
Chicago Bulls, esta anotación fue el record
de los Detroit Pistons hasta el año 2001 que lo batió Jerry Stackhouse (18
años no está nada mal para un record).
La temporada
83/84 trajo nuevo entrenador a Detroit. Un casi novato en el cargo, de nombre
Chuck Daly. Pese a ser conocido por su faceta defensiva posteriormente, Daly
convirtió a los Pistons en una mayor fuerza ofensiva de lo que ya eran en
aquella época, con una distribución de tiros bastante democrática y una
rotación de jugadores constante y larga(cosa que siempre mantuvo en Detroit).
Tripucka continuó por su camino con unos notables 21’3pts-4’0reb-3’0asist en
sólo 32 minutos por noche, que le valieron para ser elegido para el equipo All-Star por 2ª vez.
El 13 de
Diciembre de 1983, fue uno de los protagonistas del mítico partido con la
anotación más alta de la historia de la NBA, enfrentándose al mejor equipo
ofensivo de siempre en la liga, los Nuggets de Doug Moe. Detroit Pistons 186-Denver Nuggets 184. 5 jugadores se fueron por
encima de los 30 puntos(en Pistons: Isiah Thomas 47, John Long 41, Kelly
Tripucka 35 y en Nuggets: Kiki Vandeweghe 51 y Alex English 47). Les dejo el
vídeo del partido completo(en 2 partes), pues es de los que merece la pena:
Bajo el
mando de Daly, alcanzaron un record de 49-33 y Tripucka se asomó a los playoffs
por primera vez en su carrera. Tenían ventaja de campo y su rival eran los
Knicks del gran Bernard King. Cayeron en playoffs agónicamente en la prórroga
del 5º partido, con Tripucka incapaz de sujetar a King(no conozco muchos que lo
hicieran)aunque el también le hizo pasar un mal rato con sus 27’4 pts de
promedio en los 5 partidos(incluyendo 40 en el 3º de la serie). Es uno de los
únicos 5 jugadores de Detroit en anotador 40 ó más puntos en un partido de
playoffs.
Le temporada
85/86 trajo a un combo guard a Detroit vía draft que no tardó en hacer suyo el
puesto de escolta, Joe Dumars se llamaba. Detroit empezó a tener una defensa
decente, sin bajar su enorme ofensiva. Tripucka regreso recuperado, y a los 27
años en su 5º temporada en la liga, se fue a unos buenos 20p-4’3reb-3’3asist
con un 50% en Tiros de Campo en 32 minutos por noche. Pese a la mejora
defensiva del equipo, el record fue de 46-36 y no consiguieron ventaja de campo
para playoffs(como los 2 años anteriores). Fueron eliminados en 1ªRonda por los
Hawks de Dominique Wilkins y “Doc” Rivers por 3-1. La sensación de haber dado
un paso atrás era evidente.
Los Pistons
decidieron deshacerse de nuestro protagonista, que había sido su alero estrella
durante 5 campañas, junto con el center Kent Benson por el enorme alero Adrian
Dantley proveniente de los Utah Jazz, que venía de tener una tortuosa relación
con el Coach y General Manager de Utah, Frank Layden.
Aparte de
los logros puntuales que les he comentado. Dejó para los libros en sus 5
temporadas en Detroit, unos promedios de 21’7pts-4’5reb-3’2asist con un 48’4%
en Tiros de Campo y un 84% en Tiros Libres.
Aquí voy a
hacer un inciso en forma de opinión personal sobre este traspaso: Dantley era
un enorme jugador, un top-10 histórico entre los aleros de toda la historia de
la NBA, un dominador desde el poste bajo y el tiro de media distancia, pero al igual
que Tripucka era un flojo defensor y estadísticamente hablando no mejoró nada a
Tripucka, es más, incluso hizo peores números(amén de ser 3 años mayor que
Tripucka). Soy un firme creyente, que la tremenda mejora defensiva y
competitiva que experimentaron los Pistons desde este traspaso, se debió más al
comienzo de la maduración de Dumars y a la llegada vía draft ese mismo verano
de Dennis Rodman y John Salley. La prueba es que 2 años y medio después fue
traspasado por Mark Aguirre antes de la consecución del campeonato(para
contentar a Isiah Thomas mayormente). Tripucka podía haber llegado con los
Pistons a lo más grande, viendo las aportaciones(importantes también) que
hicieron tanto Dantley, como Aguirre.
Pero dejemos
estas ideas que me asaltan y no llevan a ninguna parte y continuemos.
Cuando
comenzó se 1ª temporada en Utah se vio sorprendido por su limitada cantidad de
minutos, pese a ser titular, estaba en cancha unos 23 minutos por noche y era
una 5ª ó 6ª opción ofensiva de los Jazz. Esto provocó múltiples desencuentros
desde el principio con Frank Layden, que constantemente aludía a su falta de
adaptacIÓn. Tripucka quería minutos y tiros, no ser un plato de postre. La
temporada fue un desastre para nuestro protagonista con 10’1pts-3’1reb-3’1asist
y no mucho mejor para los Jazz, record de 44-38 y eliminados en 1ªRonda(pese a
tener ventaja de campo)por los Golden St. Warriors de Eric Floyd y Barry
Carroll.
Ya en su 2ª
temporada(la 87/88, camino de los 29 años)en Utah, lo pusieron en el mercado
desde el principio y su papel en el equipo disminuyó más todavía, hasta incluso
desaparecer de la rotación, no pudiendo ser canjeado finalmente por la etiqueta
de “conflictivo” que le habían asignado(injustamente bajo mi punto de vista)en
la NBA, y a su alto salario para la época de unos 4 Millones de $ en 4
temporadas. Únanle otra de sus lesiones que hizo que se perdiera buena parte de
la campaña y la cosa no pudo acabar peor.
Después de 2
temporadas sin el protagonismo que él creía que merecía y que Layden se negaba
a darle, no fue protegido por el equipo
como uno de los 8 intocables del roster de cara al draft de expansión que se
había creado para la entrada en la liga de los Miami Heat y los Charlotte
Hornets. De hecho, no fue elegido en dicho draft sino traspasado el mismo día a
los reciente creados Hornets.
En el nuevo
equipo, su pudo ver al Tripucka de los Pistons de nuevo. Era el líder claro de
un equipo sin talento que acabó con un record de 20-62(no crean que es tan
malo, para un equipo nuevo). Sus promedios de 22’6pts-3’8reb-3’2asist en 32
minutos por noche lo hizo ponerse de nuevo en la élite de la liga. Tuvo su
particular momento de venganza hacia Frank Layden, que había abandonado los
Jazz 1 mes antes, en un partido entre Charlotte y Utah. Karl Malone puso la
palabra FRANK(el nombre de su antiguo entrenador)en los talones de sus
zapatillas, a lo que Tripucka respondió poniendo DICK en sus talones(por su
coach en los Hornets, Dick Harter). Esto fue muy mal tomado por los aficionados
de Utah y por Karl Malone, pero nos habla de quien era Kelly Tripucka.
Pero lo
cierto es la temporada siguiente(la 89/90) camino de los 31 años y con 3
lesiones en sus rodillas, comenzó un declinar en su juego, como así lo
atestiguan unos corrientes(para él, porque para otros serían la
bomba)15’6pts-4’1reb-2’8asist con un pobre 43% en Tiros de Campo y sin llegar a
los 30 minutos de juego por noche. Este declive se confirmó en la temporada
siguiente, disputando solo 17 minutos por noche, con unos números ridículos
para alguien de su calidad y siendo uno de los últimos jugadores de la rotación
del equipo. Al finalizar su contrato, con mucha dignidad bajo mi punto de
vista, decidió retirarse con 32 años cumplidos y 10 temporadas en la liga. No
deseaba jugar sin estar en condiciones de aportar.
Desde su
retirada hasta el año pasado, trabajó como comentarista para diversos medios y
equipos.
Para mi
siempre será el anotador de los Detroit Pistons anterior a la época de los “Bad
Boys” y porque no decirlo, con cierta mala suerte en su carrera en forma de
lesiones inoportunas, traspasos seguramente inmerecidos y un entrenador que
corto su carrera en el zénit de la misma. Recuerden su nombre, KELLY TRIPUCKA.
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