En el día de hoy, en el remodelado y espectacular Fernando
Buesa Arena, se daban cita dos equipos que se volverán a ver las caras dentro
de no mucho tiempo, pero sí en un ambiente y en una competición diferente, ya
que CAI Zaragoza y Caja Laboral se enfrentarán en una de las eliminatorias de
la Copa del Rey el 7 de febrero.
Pero este partido parecía a priori mucho más que un mero
entremés para la competición copera, ya que el conjunto rojillo tenía ante sí a
uno de los equipos más en forma de la Liga Endesa y posiblemente de Europa, ya
que tras la llegada de Zan Tabak, el cambio que ha dado el equipo es digno de
admirar. Por el otro lado, teníamos a un CAI Zaragoza con ganas de repetir lo
que hizo en la primera jornada de liga en casa.
Un partido que parecía
presentar todos los alicientes necesarios para poder disfrutar de un gran
encuentro.
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| FOTO: ACB.com |
El partido empezaba de manera muy animada. La intensidad por
parte de ambos equipos era digna de mencionar pero quien golpeó primero fue el
conjunto rojillo con un 0-5 de parcial tras unas buenas acciones tanto de
Aguilar como de Norel. Pero la reacción de los hombres de Tabak no se hizo
esperar demasiado y se pusieron por delante. En los primeros compases de
partido el encuentro se mantuvo equilibrado. Los locales se apoyaban en las
acciones individuales de ”los Bjelica” y Lampe mientras que los rojillos
seguían haciendo valer su acierto desde el perímetro para mantener el partido
igualado en todo momento. La contundencia ofensiva de los locales era evidente,
pero Rudez no estaba por la labor de dejar que se marcharan en el marcador y
fue ganando peso en ataque conforme se llegaba a la recta final del primer
cuarto. Pero fue un triple de San Emeterio el que cerró el primer período con
un 23-20 a favor del conjunto baskonista.
El comienzo del segundo cuarto seguía siendo muy parejo. El
Caja Laboral hacía valer su fluidez ofensiva y su poderío en el rebote para
mantener a raya a los maños pero éstos no terminaban de despegarse en el marcador.
Los vitorianos parecían estar en un principio más metidos en el encuentro pero
fue con la entrada de Aguilar en pista y el acierto de Toppert cuando el CAI
volvió a ponerse por delante en el marcador en el ecuador del cuarto. Conforme
pasaban los minutos, el desacierto (provocado por la intensidad defensiva de
ambos equipos) aumentaba y el ritmo anotador comenzó a bajar de manera tímida.
Pero era finalmente Lampe quien con 10 puntos declinaba la balanza a favor de
los locales y nos marchábamos al descanso con un 38-35 en el marcador.
La segunda mitad comenzaba con un intercambio de canastas
trepidante. El duelo Norel-Lampe empezaba de manera inmejorable pero era
Nocioni quien en los primeros minutos del cuarto sacaba las castañas del fuego
para su equipo. El partido no daba lugar a respiro alguno. Dado el gran comienzo
de Toppert y Van Rossom, todo parecía indicar que poco a poco el partido se
ponía de cara para los hombres de Abós pero Oleson estaba en un auténtico
estado de gracia en este cuarto y tras varias acciones individuales brillantes,
colocaba a su equipo 7 arriba. Independientemente del aparente dominio de los
hombres de Tabak en ambos lados de la cancha, el CAI se resistía a dejar
escapar el partido por las buenas. El partido seguía sin tener dominador claro
y finalmente nos íbamos al último cuarto con un 59-57 a favor del Caja Laboral.
Todo estaba por decidir en el Buesa Arena.
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| Foto: ACB.com |
Al inicio del cuarto el resultado se seguía manteniendo muy
igualado. A pesar del buen comienzo de los visitantes, éstos no parecían saber
dar con la tecla para mantenerse sólidos y poner tierra de por medio en el
marcador. Poco a poco, el Caja Laboral empezaba a acusar sus problemas para
anotar en este cuarto, pero lo cierto es que los rojillos no sabían
aprovecharse de la situación. El gran partido de Pablo Aguilar seguía
manteniendo a los suyos por delante pero aún había mucha tela por cortar en el
encuentro. La quinta falta personal de Dajman Rudez parecía ser un punto de
inflexión, pero la balanza seguía sin inclinarse para ningún equipo. Pero
contra todo pronóstico, llegábamos al último minuto del encuentro con una
ventaja de +3 para el conjunto zaragozano. Como llevábamos anticipando durante
todo el partido, nos esperaba un final de encuentro emocionante. Cuando el partido
parecía ponerse de cara, dos malos ataques del CAI propiciaron que Oleson fuera
a la línea de tiros libres en sendas ocasiones, y como era de esperar, el
escolta de Alaska no falló y puso a su equipo por delante. El CAI Zaragoza tuvo
finalmente la última posesión para ganar el encuentro, pero una gran defensa
local hizo que Van Rossom fallara el tiro que hubiera decantado el partido para
los rojillos. El partido concluía con un ajustado 74-73 para el Caja Laboral.
Una victoria, que sigue dejando claro el brillante estado de
forma por la que pasan el equipo dirigido por Zan Tabak, una muestra más, de
que este Caja Laboral va para arriba y va ser muy difícil de frenar.
Por otro lado, ya son dos las derrotas consecutivas que
cosecha el CAI Zaragoza fuera de casa. Una situación a priori delicada pero que
se espera que se arregle con la vuelta del conjunto rojillo a su fortín, el Pabellón
Príncipe Felipe.
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