Los Lakers no levantan cabeza, siguen de capa caída y ya llevan trece derrotas esta temporada. Ni el cambio de entrenador, ni comentarios de Magic ni el rendimiento de Kobe permiten a los californianos ganar partidos. No hay manera. Esta madrugada han vuelto a caer frente a los Cavaliers, uno de los peores equipos de la NBA.
Los de Mike d'Antoni hicieron dos malos primeros cuartos, y aunque Kobe volvió a anotar casi la mitad de los puntos (42 de 94) y tiró del carro en los momentos difíciles, Cleveland jugó a baloncesto, con un Anderson Varejao que sigue en estado de gracia (20 puntos) y secó bastante a Howard (19 puntos), un CJ Miles que se fue hasta los 28 y el retorno del jugador franquicia, Kyle Irving, que regresó con una actuación estelar de 28 puntos.
Se espera urgentemente que vuelva Steve Nash y Pau Gasol, que ve como todas las derrotas que se están produciendo desde su baja juegan en su favor, demostrando que es un jugador mucho más valioso de lo que muchos pretenden ignorar y menospreciar.
Los Lakers no están en forma. Howard sigue sin ser el pívot dominante y está a años luz de sus mejores registros. Noticias positivas ninguna. Además, el jueves viajan a Nueva York, dónde los Knicks están invictos (8-0).
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