La selección de Bélgica llegaba al campeonato después de una fase de preparación llena de problemas, en primer lugar, por la falta de buenos resultados, cosechando numerosas derrotas, y en segundo lugar, por las lesiones y falta de forma de dos de sus principales jugadores, Axel Hervelle y Mbenga. Éste último, fue descartado por el seleccionador belga antes del campeonato, pero en el último partido de preparación antes del Europeo, contra la selección francesa, y con poco más de un minuto jugado, Hervelle sufría una grave lesión de rodilla, lo que hacía que al final Mbenga acudiera al campeonato en sustitución del jugador del Bizkaia Bilbao Basket.
Las esperanzas de esta selección pasaban por encontrarse en el supuesto grupo más débil del campeonato, en el que lucharían en un principio, con selecciones como Georgia, Bulgaria y Ucrania por la tercera posición del grupo tras Rusia y Eslovenia, que daría lugar a la clasificación a la segunda fase. Pero como bien cabía presagiar por la preparación llevada a cabo por el equipo belga, el Eurobasket no comenzó con buen pie. Los dos primeros partidos del Europeo, se sabía que marcarían el devenir del papel de Bélgica en el campeonato, ya que se enfrentaban en primer lugar a Georgia y posteriormente a Bulgaria. En el primero de estos partidos, contra el equipo georgiano, dejó muy patente la falta de confianza del equipo belga, ya que desde el primer cuarto del partido, dejaron amplias ventajas, que llegaron hasta un máximo de 16 puntos ya en el segundo cuarto, y que se mantendrían más o menos en las mismas diferencias acabando 59-81.
Con esto resultado, la selección belga se veía obligada a ganar en el segundo partido del grupo contra Bulgaria, y la verdad es que la actitud mostrada cambio drásticamente con respecto al primer partido, y comandados por un gran Van Rossom y Van den Spiegel, mantuvieron el partido igualado en todo momento, e incluso con ventaja de 65-63 a falta de un minuto para el final, pero los nervios atenazaron a los jugadores belgas y acabaron cayendo por 68-65, lo que implicaba que para pasar de fase tendrían que ganar partidos contra equipos, netamente superiores en un principio como eran Rusia y Eslovenia, antes de jugar la última jornada contra Ucrania.
El tercer partido los enfrentó contra el combinado ruso, en lo que se preveía como un paseo triunfal del equipo comandado por Kirilenko, pero el equipo belga demostró las ganas que le quedaban por demostrar su valía en el campeonato, y durante los tres primeros cuartos se mantuvo en el partido luchando hasta la saciedad, con la figura destacada de De Zeeuw y Van den Spiegel, pero el último cuarto dejó muy a las claras quién era el mejor equipo en la pista y el partido concluyó con un abultado marcador de 79-58. A continuación, no quedaba otra opción que ganar los partidos que quedaban y confiar en una serie de carambolas que le dieran el pase a la segunda fase, y según se pudo ver en el partido contra Eslovenia, el equipo belga seguía confiando en sus posibilidades, ya que llevó el mando del partido hasta el descanso del mismo, pero ya en la segunda parte, el equipo esloveno se empezó a distanciar, no de una manera definitiva gracias a Van den Spiegel, pero si cogiendo diferencias considerables en el tercer cuarto, pero llegando muy igualados al final del partido con 58 iguales en el marcador, hasta que un parcial de 3-12 dejó sentenciado el partido del lado esloveno.
Por último y en un partido intrascendente para el equipo belga, aunque con el aliciente de ver si Georgia o Bulgaria, era el equipo que pasaba a la segunda fase, se enfrentó el combinado belga a la selección de Ucrania, demostrando en un principio las ganas de agradar en este último partido, pero también la falta de concentración, que le llevó a encajar unos parciales desoladores entre el final del primer cuarto y principio del segundo de 17-0, y un acumulado en el segundo cuarto de 30-10, que dejaba sentenciado el partido, quedando la segunda parte únicamente para mantener las diferencias y no llegar a un marcador muy sonrojante para el equipo belga.
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