Carlos Cherry es uno de los jugadores españoles que están jugando fuera de nuestras fronteras. Recientemente ha concedido una entrevista para Onda Joven en el programa de Baloncesto A Fondo donde ha demostrado no tener pelos en la lengua.
Primeramente, preguntado por la trayectoria de su equipo en Francia, el jugador sevillano opina que: “Este año estamos segundos, no hemos podido competir con el primero que es Mónaco y tiene un autentico equipazo. El juego es un poco diferente pero bueno, te adaptas y bien, yo estoy bastante contento”.
Preguntado por su marcha de España, Carlos lo tiene claro: “Yo tuve la mala suerte que me pilló Granada en ACB, el primer año sin problema y el segundo año a partir de Navidad no vimos un duro. Fui al Fondo de Garantía Salarial de la ACB, cobre una gran parte y eso en la ACB no sentó muy bien. Creo quitando Girona era la primera vez que se iba. Después me fui a Cáceres y el primer año bien y el segundo igual, a partir de Navidad no vi un duro y acabé en juicios para cobrar. Yo tengo familia y me dedico profesionalmente a esto así que tuve que plantearme la situación, yo tengo una edad así que dejo de jugar y me busco la vida profesionalmente de otra manera o sigo jugando donde no tenga estos problemas. Lo hablamos en casa y decidimos irnos. He jugado deportivamente en categorías inferiores pero realmente, tanto económicamente como personalmente, me merece la pena estar aquí”.
Finalmente, preguntado por la situación en la liga ACB y en el Bilbao Basket en particular el jugador andaluz cree que: “Lo mismo soy un poco radical pero a mí me pagan por jugar e igual que si el entrenamiento es a las 9, no me gusta llegar a las 9 y un minuto. Pues a la hora de cobrar, no me gusta que me paguen un día tarde, un mes tarde o seis meses tarde. Hay dos cosas para analizar. La primera es la culpa de los jugadores que es una gran culpa. Aceptamos compromisos de post-pago después de un retraso, si no me pagan es tan sencillo ir como ir al Fondo de Garantía Salarial como hice yo en Granada. Te dicen que el club sino desciende, que está en peligro. No es mi problema, yo estoy aquí y yo he hecho mi trabajo. Si los jugadores fuéramos más drásticos en todas las ligas españolas no pasaría lo que pasa.
La segunda parte es la patronal. A la patronal no le importa absolutamente nada que no le paguen a sus trabajadores y no pone ninguna norma radical para que eso no pase. Bueno, no una norma radical sino una norma como cualquier país civilizado. Entonces como las dos partes no lo quieren arreglar, pues hay problema. Cada vez habrá más problemas. Hay gente que lo tolera y deja que lo engañe, yo prefiero irme del pabellón a que me tomen el pelo. Es bastante sencilla la disyuntiva. Yo prefiero jugar en Francia a que no me paguen en España en primera o segunda división. Es sencillo”.
Por lo que lo tiene claro: “Yo creo sinceramente que me retiraré aquí, ¿volver a España para qué? Para cobrar a mitad o que no me paguen. Yo tengo familia que depende de mí y no puedo volver así. El día que vuelve a España será a lo mejor para jugar en un equipo EBA para jugar amistosamente pero profesionalmente no. Tengo ahora treinta y cuatro, tengo este año y uno más de contrato, si me encuentro bien aguantaré unos años más por aquí e incluso yo me empiezo a plantear quedarme a vivir aquí por la situación general del país. Tengo claro que si tengo la posibilidad de quedarme aquí en Francia me quedaré aquí, ahora mismo se vive bastante mejor que en España”.
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