Una semana después de la copa, de los reflexiones sobre como han salido o pueden salir los equipos después del torneo y comentado todo lo comentable, llega una crónica diferente: de un aficionado desde dentro. Os lo cuenta un aficionado del Fuenla que vivió su primera Copa del Rey, más concretamente un Fuenlablue. Saliendo el lunes a las 7 de la mañana de Madrid, con paliza en bus de por medio llego a Barcelona a las 4 de la tarde, cojo mi camiseta y mis bufandas y camino al Palau, a ver si el ambiente copero del que tanto hablan era cierto. Efectivamente, aficionados de todos los equipos (presentes o no en la copa) empezaban a verse por la ciudad, y baskonistas y guipuzcuanos dominaban los alrededores del Palau cantando y bebiendo juntos.
Lo de juntos es importante, es un ejemplo para las aficiones de otros deportes que solo ocupan los informativos por trifulcas.
Una vez dentro confirmé en primera persona como vive la afición del Caja Laboral, increíble. Y después de vivir ese primer partido tenso y cerca de la sorpresa llegó el turno del anfitrión, llenas las gradas esta vez la mayoría del pabellón tetiñió de blaugrana, eso sumado al equipo de Xavi Pascual le puso las cosas muy difíciles al Alicante que después de su temporadón le tocó bailar con la más fea y no tuvo suerte.
Llegó el viernes con paseo por Barcelona, turismo mañanero, luciendo por la ciudad la bufanda del Fuenlabrada haciendo saber que era nuestro turno 11 años después. Se hizo eterno el día hasta las 9 y media, era el último cruce de cuartos. Así que después de una gran previa hablando de todo menos de basket, había que relajar, llegamos al pabellón a ver el Unicaja-Banca Cívica más largo de nuestra vida, mientras se produjo la primera y única sorpresa de la copa con un Sevilla bastante superior aunque terminase sufriendo. Con todo esto eran ya las 9, quedaba media hora...y qué media hora. Nos propusimos amenizarla con cánticos en la que nos acompaño la afición del Baskonia, con la que sufrimos un gran hermanamiento estos 4 días, y así empezó el partido, con nuestras gargantas más que calientes.
Del partido, poco que decir, el Fuenla plantó cara e hizo sufrir al futuro campeón pero no pudo ser perdimos el partido, pero no la energía como se puede ver en el gran video de acbtv, minutos mágicos de equipo-afición que nunca olvidaremos ninguna de las dor partes. Tocaba salir a probar la primera gran noche copera y así fue, gran noche con aficionados del Estu, Penya, Baskonia, Bilbao...que me hizo ver que la copa era especial y que no solo se disputaba en una cancha de baloncesto.
Después de escasas horas de sueño y una lucha conmigo mismo por levantarme el sábado y, aunque no jugase el Fuenla, tocaba ver gran baloncesto, esta vez infiltrado en la afición del Caja Laboral en la primera semifinal, animando como uno más y sintiéndome parte de esa gran afición. No pudo ser y ganó el Barça en un gran partido, la segunda semifinal se empezó a decidir antes que la primera (reconocimiento al gran mérito del Banca Cívica) pero no terminó el ambiente del pabellón con la charanga baskonista animando el cotarro. Cotarro que rápidamente estaba formado por todas las aficiones cantando y animándose unas a otras: esto es baloncesto. El domingo fue más tranquilo, apurando las fuerzas y la cartera, comiendo con baskonistas cerca de la rambla y camino a ver la final. Un Madrid-Barça, no era una novedad pero seguía siendo una final, gran partido de los blancos y colorín colorado la copa se había acabado.
Sacando conclusiones se llega a que merece la pena y a la copa esté o no tu equipo, para disfrutar del ambiente a veces mágico, os lo recomiendo. Con esto termino, dando las gracias al blog por dejarme volver a publicar este homenaje a las aficiones después de este tiempo fuera del blog. Especial agradecimiento también a la afición del Baskonia y a toda la del Fuenla por seguir haciendo grande este equipo pequeño, especialmente a los FuenlaBlues.
Foto:solobasket.com |
Una vez dentro confirmé en primera persona como vive la afición del Caja Laboral, increíble. Y después de vivir ese primer partido tenso y cerca de la sorpresa llegó el turno del anfitrión, llenas las gradas esta vez la mayoría del pabellón tetiñió de blaugrana, eso sumado al equipo de Xavi Pascual le puso las cosas muy difíciles al Alicante que después de su temporadón le tocó bailar con la más fea y no tuvo suerte.
Llegó el viernes con paseo por Barcelona, turismo mañanero, luciendo por la ciudad la bufanda del Fuenlabrada haciendo saber que era nuestro turno 11 años después. Se hizo eterno el día hasta las 9 y media, era el último cruce de cuartos. Así que después de una gran previa hablando de todo menos de basket, había que relajar, llegamos al pabellón a ver el Unicaja-Banca Cívica más largo de nuestra vida, mientras se produjo la primera y única sorpresa de la copa con un Sevilla bastante superior aunque terminase sufriendo. Con todo esto eran ya las 9, quedaba media hora...y qué media hora. Nos propusimos amenizarla con cánticos en la que nos acompaño la afición del Baskonia, con la que sufrimos un gran hermanamiento estos 4 días, y así empezó el partido, con nuestras gargantas más que calientes.
Del partido, poco que decir, el Fuenla plantó cara e hizo sufrir al futuro campeón pero no pudo ser perdimos el partido, pero no la energía como se puede ver en el gran video de acbtv, minutos mágicos de equipo-afición que nunca olvidaremos ninguna de las dor partes. Tocaba salir a probar la primera gran noche copera y así fue, gran noche con aficionados del Estu, Penya, Baskonia, Bilbao...que me hizo ver que la copa era especial y que no solo se disputaba en una cancha de baloncesto.
Después de escasas horas de sueño y una lucha conmigo mismo por levantarme el sábado y, aunque no jugase el Fuenla, tocaba ver gran baloncesto, esta vez infiltrado en la afición del Caja Laboral en la primera semifinal, animando como uno más y sintiéndome parte de esa gran afición. No pudo ser y ganó el Barça en un gran partido, la segunda semifinal se empezó a decidir antes que la primera (reconocimiento al gran mérito del Banca Cívica) pero no terminó el ambiente del pabellón con la charanga baskonista animando el cotarro. Cotarro que rápidamente estaba formado por todas las aficiones cantando y animándose unas a otras: esto es baloncesto. El domingo fue más tranquilo, apurando las fuerzas y la cartera, comiendo con baskonistas cerca de la rambla y camino a ver la final. Un Madrid-Barça, no era una novedad pero seguía siendo una final, gran partido de los blancos y colorín colorado la copa se había acabado.
Sacando conclusiones se llega a que merece la pena y a la copa esté o no tu equipo, para disfrutar del ambiente a veces mágico, os lo recomiendo. Con esto termino, dando las gracias al blog por dejarme volver a publicar este homenaje a las aficiones después de este tiempo fuera del blog. Especial agradecimiento también a la afición del Baskonia y a toda la del Fuenla por seguir haciendo grande este equipo pequeño, especialmente a los FuenlaBlues.
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