El Ave Fénix siempre resurge de sus cenizas

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Aunque muchos ya casi no lo recuerden, Sergi fue otro de los grandes productos promocionados por esa cuna del baloncesto que es la cantera del Joventut de Badalona. Entró a formar parte del club catalán en 1992, con tan sólo 11 años. Tras varios años ascendiendo de categoría, consiguió hacerse indiscutible en el filial del DKV Joventut gracias a sus buenas actuaciones. Su buen nivel de juego y su manifiesta calidad le hicieron posteriormente conseguir un puesto en el primer equipo badalonés en la temporada 1999/2000.

Tras ese año, el TAU Cerámica pondría sus ojos en él. Estaba a punto de comenzar la mejor etapa sin lugar a duda alguna del escolta. 

Después de una gran primera temporada en la Penya, el Saski Baskonia anunciaba en verano del año 2000 el fichaje de Sergi Vidal. El jugador de 1.99 metros de altura, se mostraba más que ilusionado y declaraba "Vengo aquí a ganar títulos y no me iré hasta que no consiga ganarlo todo con este equipo, y prometo a la afición que este año seremos campeones." No se equivocaba el bueno de Sergi.

Durante sus 9 años en las filas del conjunto vasco, consiguió:  4 Copas del Rey (2001-02, 2003-04, 2005-06 y 2008-09), 2 ligas ACB (2001-02 y 2007-08), 4 Supercopas de España (2005, 2006, 2007 y 2008) y ser dos veces subcampeón de la Euroliga (2000-01 y 2004-05). 

Formó parte de una de las mejores generaciones que ha pasado por el Baskonia. Junto a jugadores de la talla de Scola, Prigioni, Splitter o incluso Oberto y Nocioni (dependiendo del año) ayudó a encumbrar a uno de los equipos que actualmente se considera más sólido del viejo continente. 

El juego de Sergi destacaba por sus electrizantes penetraciones y un buen tiro de campo, tanto de dos como de tres. Gracias a ello, se erigió como uno de los pilares del TAU Cerámica de la década de los 2000 y también se ganó el cariño de la afición vasca.

Su gran momento de juego no pasó desapercibido para los distintos seleccionadores que tuvo España durante la mencionada década. Sergi debutó en 2005 con la selección en Alicante de la mano de Mario Pesquera frente a Francia, anotando 3 puntos. Durante ese mismo año fue además uno de los convocados para el Campeonato de Europa en Serbia, en el que la selección acabaría consiguiendo el 4º puesto.

Sin embargo, el jugador nunca se convertiría en un fijo del combinado de nuestro país. La competencia en su puesto con jugadores como Navarro o Rudy Fernández, dos de los mejores escoltas de la historia de España, provocaron que nunca pudiera brillar con la selección. A pesar de ello, en 2009 se volvió a especular con la vuelta de Vidal a la selección y siempre ha sido un jugador a tener en cuenta por los seleccionadores nacionales.

En el verano de ese mismo año, saltaba la noticia bomba: Sergi Vidal fichaba por el Real Madrid por 600000€. El conjunto blanco se hacía además con los servicios del argentino Pablo Prigioni y cerraba la venta de Brad Oleson al Baskonia por 5 temporadas.

Lo que pudo haber constituido un paso adelante en la carrera profesional del escolta de Badalona, resultó ser todo lo contrario.

El paso de Sergi Vidal por el Madrid comenzó mal, y generalmente lo que mal empieza mal acaba. En su primera temporada no pudo debutar hasta diciembre, por una lesión en la muñeca. A pesar de llegar al club de la capital española con altas expectativas, sus ganas se fueron diluyendo poco a poco ante la incredulidad de muchos. Sergi apenas contó para ninguno de los entrenadores que tuvo en el Real Madrid.

Pero como dice el título de este artículo el Ave Fénix siempre resurge de sus cenizas.

El verano pasado confirmó el escolta confirmaba su salida del club blanco dirección San Sebastián. Sergi llegaba con ganas de olvidar la “peor etapa deportiva de su carrera”. En sus primeras declaraciones explicaba la razón por la que había elegido el Bruesa. “Sobre todo por el interés que han mostrado por mí desde el primer momento. La sensación que daba era la de un club que realmente quería que estuviera y donde parece que las cosas se hacen bien”, afirmaba.

Trascurridas las 5 primeras jornadas podemos confirmar que, por el momento, Vidal ha tomado más que acertada. El jugador está en un momento de forma colosal, con muy buenos promedios (14 puntos, 4 rebotes, 2 asistencias y 4 faltas recibidas por partido) y lo que es más importante, vuelve a ser un jugador importante.

Hemos de decir que todos los entrenadores y compañeros que han compartido vestuario con el catalán han destacado su capacidad de sacrificio y de trabajo. Desde aquí, queremos felicitar personalmente a Sergi Vidal su por estado de forma y por su aportación al baloncesto español.