Muchos aficionados de este mundial al ver este título en el artículo se sorprenderán, de que hablará este titular. Si ponen la palabra Susijengi en el traductor en el idioma finlandés, se traducirá en la palabra del castellano lobo, los lobos que visitaron la sede del mundial de Bilbao.
Disfraces, gritos, pancartas, música, pero sobre todo buen ambiente es lo que los 10.000 aficionados finlandeses que se acercaron a la sede de Bilbao han proporcionado a la localidad de Barakaldo. Su gran humor en las derrotas, su euforia en la primera victoria que logran en un mundial y su amabilidad con la gente son dignas de admiración.
Este mundial de 2014 en España era el primero que jugaba la selección finlandesa y venía con todo; incluso su legendario jugador Hano Motola, jugador de 40 años retirado para la competición de clubes pero que por su país, por esta selección y por los susijengi debía de jugar este mundial. Como base, la gran estrella de la selección, Peeteri Koponen, que vaya mundial! Un reclutamiento de última hora como el NBA Erik Murphy y los escoltas Shawn Huff y Sasu Salin. Estos jugadores no pensaban que se movilizaría tanta gente y el orgullo de estas personas estaría en juego.
Llegó el primer partido para los lobos, no era un equipo cualquiera, la gran selección de Estados Unidos. Todo sobre la marcha, el Team USA acribilló al equipo de Henrick Dentmand, pero los aficionados, los 8000 que estuvieron en el BEC, no cesaron de animar a sus jugadores los 40 minutos de juego, contagiando a todos los aficionados que acudieron al BEC.
El siguiente día fue el día de los finlandeses. Jugaban contra la selección de Mike Fratello. La teoría decía que los ucranianos debían de superar a la selección finlandesa. Pero, ni la afición, ni los jugadores, ni el cuerpo técnico no entienden de lógicas, y tras un espectacular partido donde Shawn Huff y Peetteri Koponen se salieron desde la línea de 6.75. La fiesta comenzó en el minuto 0 y culminó a las 3 de la noche.
Llegó la primera victoria en la historia de los mundiales y los aficionados lo celebraron a lo grande. Recibieron a los jugadores como estrellas y a los jugadores se les veía sensiblemente emocionados. Jugadores como Hano Motola soñaban con este momento desde hace muchos años y lo demostró en el 'speech' que lanzó a su afición: "Susijengi sois los mejores, os llevo en el corazón".
Una derrota in extremis frente a la República Dominicana y otra derrota frente a la selección poderosa de Turquía en la prórroga obligaban a ganar frente a los Tall Blacks y su correspondiente haca. Los Tall Blacks también se lo jugaban todo y fue un partido muy duro. Fueron más los isleños y la depresión caía sobre los finlandeses. Koponen, Salin y Motola se despidieron entre lagrimas del parqué como otros muchos finlandeses que se encontraban en la fan zone. El júbilo se convirtió en tristeza en las que les esperaba un largo viaje de vuelta, eso si los Susijengi siempre quedarán en el corazón de los bilbainos y de los habitantes de los alrededores amantes del baloncesto. Por eso, digo SUOMI! SUOMI!