Rajon Rondo es, a día de hoy, el líder de los Celtics de manera indiscutible. Que lástima que no pudiera batir el récord de Magic por culpa de su expulsión en el partido frente a Brooklyn, porque estoy convencido que lo hubiera logrado. Cuando Rajon tiene el balón en las manos, todo puede ocurrir. Parece que el parquet sea pequeño, que todo sea fácil, que tenga ojos en cada vértice de la cara y pueda verlo todo.
Esta madrugada, pese a la derrota de los Celtics en casa de Philadelphia, Rondo ya tenía un 14-10-8 al descanso. El señor del triple doble, podría heredar el apodo que se ganó Jason Kidd en New Jersey Nets, volvió ayer a hacer una exhibición de cómo se dirige un equipo (aunque falló el tiro que pudo dar la victoria a los Celtics tanto en el último cuarto como en la prórroga).
Rondo volvió a brillar con su juego individual al conseguir un triple-doble de 16 puntos, 13 rebotes -su mejor marca de la temporada- y 14 asistencias. El primer triple-doble de Rondo en lo que va de temporada ni los 27 puntos conseguidos por el alero Paul Pierce impidieron la derrota de los Celtics (10-9), que son cuartos en la clasificación, por detrás de los Sixers.
El "9" sigue haciendo historia.
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