Muchos pensaron que Thiago Splitter se equivocó hace dos años en dejar Vitoria y marchar a la mejor liga del mundo. Muchos, quizás los mismos que dijeron que Scola no haría un buen papel, se volverán a equivocar.
A sus 27 años, y pese a no ser un estilo de juego que beneficie sus cualidades (juego al poste espectacular -con un juego de pies bárbaro- y buen tiro a media distancia), el brasileño está empezando a despuntar en la NBA.
Todos coincidimos en que está en el equipo adecuado para triunfar, o al menos para disfrutar de minutos y aprender. Gregg Popovich es de los pocos entrenadores que consigue sacar el máximo rendimiento de sus pupilos (sea cual sea la procedencia o la experiencia en la mejor liga del mundo) y Tim Duncan es el mejor "4" del que aprender.
Aunque la temporada pasada estuvo marcada por las lesiones (que le llevaron a la irregularidad), parece que las olimpiadas le han venido bien al "22", que mejora sus registros de la temporada pasada mínimamente.
Esta madrugada, en uno de los escenarios más históricos de la NBA, el TD Garden, ha acompañado a Parker y Duncan para conquistar Boston. Ha sumado 23 puntos en 22 minutos de juego, defendiendo bien a Kevin Garnett y siendo muy eficaz en ataque.
¿Será el punto de inflexión de Splitter en su carrera NBA o solo será un partido esporádico? Si sigue con el afán competitivo que tenía en Europa y sigue mejorando su físico, no descarten ver un nuevo caso Luis Scola. Echamos de menos a ese Splitter estelar. Esperemos que demuestre su valía.
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