Este miércoles, 11 de noviembre, se ha
presentado la Fundación Cantera-Fundació Planter en los Desayunos Deportivos de Europa Press con la presencia de Miguel Cardenal, presidente del
CSD, Jordi Villacampa, presidente del FIATC Joventut de Badalona, y Fernando Galindo,
presidente del Movistar Estudiantes.
Cuando a principios de septiembre, Miguel Cardenal
valoró de forma negativa la no inscripción del COB en la liga ACB, lo hizo
desde la poltrona del que se cree guardián de las llaves de lo que acontece en
el mundo del deporte. Y es cierto hasta cierto punto, ya que posee los
mecanismos validos de arbitraje para este mundo, pero que adolece de la falta
de tacto del que se presenta a la foto con el presidente de la FEB para recibir
la insignia de oro de esta entidad y cuatro días después debe enviar una nota
al mismo José Luis Sáez para que rectifique la decisión de no inscribir en
primer lugar al Uni Girona en la EuroLeague Women en beneficio del Perfumerías
Avenida promovida por la indignación de esta decisión en la redes sociales. Imparcialidad
y arbitraje en estado puro.
Frases como: "Hoy tenemos una liga de
fútbol que ha trabajado con el Consejo, que está saneada económicamente y que
ha cambiado sus parámetros de una manera muy trascendente. Y creo que ese es un
reto que tiene el baloncesto y que lo va a tener que afrontar" o el CSD no
"consentirá que quienes están dentro de una competición pretendan
cerrarla" dicen mucho de quien aupó a la presidencia de la ACB a un querubín
suyo que ha sido puesto en ridículo en
cuanto se ha salido un ápice de lo que esperan los clubes de él, que no es otra
cosa que leer el discurso de apertura, salir en la foto y entregar el
trofeo al final de la liga.
Quizás por eso no sorprende ver que este
lunes día 11 se ha presentado en sociedad la Fundación Cantera-Fundació Planter
en los Desayunos Deportivos de Europa Press con la presencia de Miguel Cardenal,
Jordi Villacampa y Fernando Galindo. Curiosamente
dos de los presidentes que pasan por gravísimas dificultades económicas en sus
clubes y que buscan por todas las formas posibles solucionar sus problemas.
En el marco de esta presentación, ver como Jordi Villacampa se expresa desde la tribuna para decir que: "El
baloncesto genera lo que genera. Cada vez se forma menos y hay una fuga de
talento que no podemos retener. Es un problema importantísimo porque los
jugadores cada vez se van más rápido. Tenemos dos gigantes, ellos uno blanco
(Real Madrid) y nosotros uno azulgrana (Barcelona). Somos equipos que caemos
simpáticos" es por lo menos chocante cuando la última operación más famosa del Joventut,
que fue la de Ricky Rubio, produjo unos daños enormes al sobreexplotar el
precio de un jugador por encima del mercado, mandando un buen recado a los
grandes, que a partir de ese momento se fijaron en la
búsqueda de excelentes jugadores de cantera en clubes de Europa con el
consiguiente rédito económico. Mirotic, Doncic, Hezonja, Alex Abrines… no son
jugadores que hayan salido de las canteras de Estudiantes y Joventut. Al
contrario de los Rudy, Mumbrú y Raúl López, que si lo han hecho, pero que pertenecen
a un modelo de negocio que se antoja caduco y desfasado.
Quizás por eso, las declaraciones de Jordi
Villacampa en estos Desayunos aludiendo a la necesidad de mantener el negocio
de la cantera como sinónimo de viabilidad sorprenden: "Hay pocos clubes que tengan
las mismas similitudes que nosotros y el proyecto está pensado para nosotros.
No tenemos otro remedio que vender, pero nos tenemos que proteger. Seguiremos
insistiendo en los que nos diferencia de otros clubes […] hemos tenido la
tentación de cerrar la cantera y ahorrar ese millón de euros. Pero creo que nos
equivocaríamos. Hay que seguir luchando para que el talento no se vaya, seguir
formando y seguir protegiéndonos" cuando fue precisamente la venta
de Ricky Rubio, y por la saca pecho: "Hace cuatro años vendimos a Ricky
Rubio al Barcelona por cuatro millones de euros, eso es un récord de
Europa" la que motivó que los clubes grandes se olvidaran de estos clubes
para empezar a crear su modelo de negocio.
En el otro lado de la balanza, las
declaraciones del presidente del Estudiantes, club irreconocible para la mayoría
de los aficionados, que vibraban cuando los toreros salían a saludar tras los
partidos, e incluso antes, cuando el añorado Fernando Martin dejaba la impronta
de toda la fuerza de sus movimientos en el Ramiro, y que corresponden al mayor
periodo de identificación del aficionado con el club, y el baloncesto, antes de que la Comunidad de
Madrid metiera sus zarpas en la entidad a través de Adecco y la Mutua Madrileña de
Transportes deshaciendo todo lo andado, tienen su aquel que nace de la
necesidad de salir en una foto política con el presidente de CSD: "La
situación política no fue ningún obstáculo para que esta iniciativa se
plantease. Miguel Cardenal no dudó ni medio minuto en decir que apoyaba sin
discusión esta iniciativa […] Tenemos 1.200 niños y niñas en la cantera, pero
somos mucho más que una cantera, formamos personas. Sabemos que la casi
totalidad no van a ser profesionales, pero les formamos con las mismas ganas
que si todos fueran a conseguirlo. Más del 40 por ciento de jugadores y entrenadores
de la selección española se han formado en nuestras canteras de Estudiantes y
Joventut". Para no decir nada o decir precisamente todo al señalar
finalmente que: "Somos el primer equipo de muchos y el segundo de todos"
quizás porque antes era así y ya no lo es, ya que equipos como Valencia, Unicaja,
Bilbao o CAI han venido a ocupar ese lugar hace tiempo perdido.
Por último hay que mencionar el resumen final
del presidente de Estudiantes: "Esta Fundación no solamente va a
trabajar en Madrid y Cataluña, queremos que trabaje en toda España a través de
colaboraciones. También queremos sacar nuestro conocimiento fuera de España
porque son experiencias que podemos acreditar perfectamente" que
marca las pautas incomprensibles de algo que no tiene ni pies ni cabeza porque mas allá de estos clubes existen otros que llevan cuidando la cantera desde hace muchísimo más
tiempo y de la que se han provisto estos equipos sin que nadie hasta la fecha
allá hecho mención de ello, salvo el padre de Pablo Laso, el maestro del
baloncesto Pepe Laso, cuando dejó bien claro, en una entrevista en 2012, de donde
había salido el mejor alero de Europa en su categoría, Alex Abrines. Por no mencionar
que son los grandes, Madrid y Barça, los que se van fuera.
Los dos clubes con más solera del baloncesto
ACB agonizan y se han ido a juntar con quien quiere hacer de la ACB un lugar
que ya no exista. Probablemente este favor pasará factura en la Asamblea de
Clubes. Un lugar vedado (y con razón) para todos aquellos que hacen de la función
pública lo más alejado de la vocación de servicio que esta tiene. Como el presidente
de la FEB, al que sorprende no encontrar en la foto de estos desayunos… algo
que ya hubiera sido “demasie”, recordando los viejos momentos de solera de estos clubes, o "amazing", que es más actual.
