Hace 21 años, en Chicago, nacía un tal Anthony Davis. El Dream Team acababa de dejar enamorado al mundo del baloncesto con un juego único e irrepetible. Ahora, en 2014, la ceja más famosa de la NBA ya es leyenda viva del baloncesto. Pese a su juventud posee un título NCAA, un oro olímpico y el Mundial.
Foto: projectspurs.com |
Anthony Davis ha sido el pívot titular de Estados Unidos. Coach K no ha dudado en darle galones y él no ha decepcionado. Segundo máximo anotador de promedio (solo le supera Harden), segundo reboteador (solo le supera Faried) y un promedio de 2,3 tapones por partido que le han situado en la cúspide de esa clasificación en el Mundobasket.
A la espera de un nuevo curso, Davis ha cerrado un año de ensueño. Se ha consolidado como uno de los mejores pívots de la NBA, ha sido all-star, líder en tapones por encuentro y el más joven en la historia en promediar 20 puntos y 10 rebotes, además de 2,8 tapones, por partido en una temporada. SegúnSynergy Sports, ha anotado desde siete posiciones diferentes, lo que da idea de su abanico de recursos en ataque.
A sus 21 años ha sido campeón de la NCAA con Kentucky, número uno del draft, oro olímpico, All-Star y ahora medalla de oro en el Mundial. Le falta un MVP y un anillo, algo poco probable si los Pelicans mantienen el nivel de otras temporadas.
Anthony Davis, una joven estrella con mucho camino recorrido.
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