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sábado, 29 de marzo de 2014

Sweet 16: Kentucky elimina al campeón, Gators y Spartans no fallan mientras los Cyclones se despiden y sigue el sueño de Dayton

Tras la calma volvió la tormenta, y es que el Sweet 16 llegaba con la expectación y emoción que acostumbra, porque conforme la cita en Arlington se avista en el horizonte, son cada vez menos los supervivientes del Gran Baile. Esta ronda ha sido un claro reflejo de las exigencias a las que te somete el torneo, siendo testigos de la continuidad de la "cenicienta", la épica de Huskies y Wildcats, el oficio de los de Michigan y la firmeza de los Gators entre otras muchas cosas que les resumimos aquí:
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South Region


Dayton se lleva el duelo de “cenicientas”


Cuando crees que les has visto todo, los chicos de Archie Miller te vuelven a sorprender. Tras cosechar brillantes victorias ante rivales de la talla de Ohio State y Syracuse, la imprevisibilidad de Dayton volvió a salir a la palestra, en esta ocasión ante Stanford, que en sus intentos por seguir sorprendiendo, sucumbió a la labor coralde un equipo cuya capacidad para involucrar a todos en la contienda se erige como su principal arma. Contra todo pronóstico, aquella defensa zonal que había hecho estragos a Kansas no funcionaba ante unos Flyers incisivos, agresivos y con mucho descaro que salían imponiendo su ley ante unos Cardinal que aun echando mano del buen hacer en la pintura de Dwight Powell y Stefan Nastic no conseguían frenarles. Fue precisamente ahí donde se encontraría el factor diferencial, ya que la superioridad interior se veía contrarrestada por un conjunto que ante la duda ponía la directa, haciendo gala del acierto de Jordan Silbert desde el perímetro para decantar la balanza y conseguir su meritorio pase al Elite Eight. (82-72)
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Florida no pisa el freno ante UCLA

Enfrentamiento lleno de contrastes, donde desde el inicio las espadas se colocaron en todo lo alto. Los Gators mostraban su solidez en ambos lados de la cancha, firmes en defensa, y cautelosos y conservadores en ataque, mientras que los de Steve Alford intentaban golpear primero, proponiendo sin éxito un juego desenfrenado con el que poder desafiar la hegemonía de los de Gainesville. Pese a su irregularidad, Michael Frazier a base de triples conseguían abrir brecha ya en la primera parte, forzando a que los californianos tuvieran que mantenerse a remolque, al acecho en busca de esa oportunnidad con la que dar un golpe sobre la mesa. Sin embargo, independientemente de que los Bruins permanecieran con vida en todo momento, esa oportunidad nunca llegaría, ya que cuando Jordan Adams recortaba distancias o Kyle Anderson entraba en escenaera de nuevo Frazier, quien junto a la soberbia dirección de Kasey Hill salvaban los muebles. Con el choque igualado en la recta final, aparecía Scottie Wilbekin como agua de mayo para los suyos, asumiendo responsabilidades y respondiendo de la mejor manera posible, anotando de todas las formas habidas y por haber cada vez que el balón llegaba a sus manos, propiciando que el partido estuviera listo para sentencia, poniendo punto y final a la andadura de UCLA en este March Madness y prolongando su racha de 29 victorias consecutivas. (68-79)

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East Region


Los Spartans presentan su candidatura al título

Como era de esperar, partido trabado, de máxima exigencia física en la que la defensa de uno y otro dejaron claro desde los primeros compases que cada canasta iba a valer su propio peso en oro. Sin embargo, en el duelo entre dos de los más bloques más compactos de toda la competición, fueron los Spartans quienes golpearon primero echando mano de la mejor versión de Branden Dawson, abriendo una brecha que poco tardaría en cerrarse y es que en cuestión de minutos, los Cavaliers despertaban y subiendo las líneas atrássecaron a su oponente y con Joe Harris y Brogdon como estiletes devolvían la igualdad al encuentro. Con las espadas en todo lo alto en la segunda mitad, el intercambio de golpes entre ambos continuaba a medida que Payne se entonaba y Brogdon seguía sumando.
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El encuentro estaba predestinado a verse resuelto en un final que acabaría siendo de locura, donde Dawson volvía a manifestarse para imponer un parcial de 15-4 a priori muy difícil de salvar. Pero fue entonces cuando un triple de Justin Anderson ponía las tablas y la pizarra de Tony Bennett dejaba en bandeja un triple de Joe Harris que respondía al anterior de Payne, siendo finalmente la línea de personal la que se erigiría como juez del encuentro. Fue ahí donde una vez más, se volvió a sacar a relucir el temple y la experiencia de una Michigan State que en su intachable andadura hacia la F4 de Arlington, demuestra saber sufrir ante una siempre combativa Virginia.


Los Huskies llaman a la puerta

Posiblemente anoche disfrutamos de la mejor versión de UConn, porque si las dudas que rodeaban a los de Kevin Ollie venían dadas por la irregularidad y falta de apoyos a Shabazz Napier, se advirtó una auténtica demostración de pluralidad y diversidad anotadora. Serios y muy sólidos, los Huskies imponían su ley ya desde los primeros compases ante unos Cyclones incómodos, espesos y que no lograban encontrarse así mismos, viendo como el rival abría brecha conforme sus fallos se sucedían. Pese a que era el explosivo backcourt formado por Napier y Boatright el que dinamitaba el encuentro, era DeAndre Daniels quien poco a poco maniataba a una Iowa State que se encomedaba a las continuas acometidas de un voluntarioso Dustin Hogue, que ante la baja de Georges Niang cogía las riendas como jamás habíamos visto hasta el momento.
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Más allá del favorable resultado, las sensaciones dejadas por uno y otro eran bien distintas, porque con Melvin Ejim y DeAndre Kane desaparecidos en combate, el partido estaba aún más cuesta arriba si cabe, porque por mucho que Dustin Hogue continuaba imperial y Monte Morris aparecía, Daniels veía el aro como una piscina. Con la tónica del enfrentamiento prácticamente intacta, los de Fred Hoiberg apuraban todas las opciones posibles conforme el tiempo comenzaba a apremiar, pero independientemente de los intentos de Kane y Hogue, la firmeza de Connecticut y la frialdad desde el tiro libre terminaban por marcar el devenir del encuentro.
Gris final para el periplo colegial tanto de Ejim como de Kane que habían sucumbido a un equipo que había dado buena cuenta de que es algo más que Napier, los Huskies no han dicho su última palabra.


West Region


Arizona sobrevive a los Aztecs

Como quien dice, los mejores jugadores son aquellos que aparecen cuando más se le necesita, y es que independientemente de una noche desafortunada de cara al aro, Nick Johnson volvió a ser determinante a la hora de la verdad. Los Aztecs plantearon un encuentro de máxima exigencia física con la que parar el dinamismo de unos Wildcats incómodos en los primeros compases ante la batalla impuesta por su rival, que sacaba a relucir una vez más la mejor versión de Xavier Thames, perfectamente secundado por un combativo Josh Davis. Su estrella no entraba en vereda, Tarczewski se encontraba con problemas de personales y aunque mantenían a raya a San Diego State en el marcador, solo Aaron Gordon y Rondae Hollis-Jefferson conseguían sumar. Pero fue llegados a la recta final cuando Nick Johnson irrumpía para marcar un antes y un después en la contienda, liderando a los suyos a un parcial apabullante con el que llevarse el triunfo en un visto y no visto y permanecer impasibles en su candidatura al título. (64-70)

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Wisconsin sigue con paso firme

 Los de Bo Ryan se veían las caras con unos Bears en alza, que de menos a más, habían conseguido disipar todas las dudas sugeridas durante la temporada regular, haciendo de su defensa su bastión sobre el que retomar el vuelo y colocarse en el Sweet 16. Pero en esta ocasión, los Badgers fueron demasiado, porque si bien es cierto que la inspiración y fluidez brillaba por su ausencia en uno y otro, Wisconsin tomó las riendas del encuentromás pronto que tarde, apoyándose en la sobriedad de un Kaminsky dominante, que a su vez se veía eficazmente acompañado por Ben Brust o Nigel Hayes, consiguiendo maniatar a un rival impotente,impidiendo cualquier reacción  que cambiaran las tornas. De esta manera, ni el voluntarioso dúo Austin-Jefferson era suficiente para impedir que los Badgers hacerse con su billete para el Elite 8 por primera vez desde 2005.

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Midwest Region

Kentucky va en serio

Si ya de por sí los derbis de Kentucky prometen emociones fuertes, cuando éstos se dan en el March Madnessla contienda roza lo épico. Haciendo gala de su condición de favorito, los Cardinals salieron como un tiro, dando un golpe sobre la mesa y poniendo tierra de por medio de la mano de Russ Smith, Luke Hancock y Montrezl Harrell. Pero cuando los de Pitino parecían más enchufados y se lesionaba uno de los pilares de los Lexington como es Willy Cauley-Stein, los Wildcats reaccionaron, y con Randle como líder, se mantenían al acecho pese a las acometidas de Russ Smith. A la salida de los vesturiarios Kentucky demostraba tener las ideas claras, pero la solidez rival parecía un muro difícil de escalar hasta que aparecería de la nada Dakari Johnson para hacer daño en la pintura, que unido a la sobriedad defensiva y la irrupción de Poythress llegaban al clutch time con el encuentro al alcance de su mano. De esta manera, aunque fuera Andrew Harrison con un triple decisivo el que les ponía las cosas de cara, Randle sentenciaría el pase al Elite 8 tras anotar dos tiros libres que luego Russ Smith no conseguiría superar con un triple a la desesperada que ponía punto y final a su carrera universitaria.
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Quien lo diría hace apenas un mes, tras una temporada regular suscitando todo tipo de dudas, los de Calipari sigue de menos a más, demostrando que ahora mismo no tienen techo en el torneo.


Michigan sufre, pero sobrevive

Visto lo visto durante todo el choque, cuesta creer que los de Beilein estuvieran a punto de quedarse fuera, y es que tras dominar y mandar con solvencia en el luminoso, un final surrealista propiciado por errores de los Wolverines dieron alas a unos Volunteers que se mantuvieron a remolque en busca de esa oportunidad que acabó llegando. Sin embargo, el resto del partido fue bien distinto, porque si bien Jordan McRae y Josh Richardson se echaban el equipo a las espaldas y causaban estragos a los de Ann Arbor, Michigan controlaba a base de triples. El perímetro gozaba de una inspiración imparable que hacía permanecer impotente a su oponente, quien sufría del acierto de Stauskas, LeVert, Irvin o incluso Jordan Morgan, que a su vez le complicaba la vida a un Jarnell Stokes que no lograba acomodarse. Porque cuando todo parecía estar muerto y visto para sentencia, los de Cuonzo Martin pusieron la directa y ante las continuas imprecisiones y relajo de los Wolverines, tiraron de casta, orgullo y Jordan McRae, que continuaba con su particular exhibición ofensiva. Pero su “dúo dinámico” no iba a ser suficiente para consumar la remontada, ya que cuando Michigan les regalaba el balón para decantar la balanza, una falta en ataque de Stokes dilapidaba sus opciones y dando pie a la superviviencia de Michigan.

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Así quedan los emparejamientos una vez llegados al Elite 8:

  • Florida vs Dayton (South Region)
  • Wisconsin vs Arizona (West Region)
  • Michigan vs Kentucky (Midwest Region)
  • Michigan State vs Connecticut (East Region)

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