Son de esas noticias que un deporte como el baloncesto (y cualquier otro) no merece dar. La Vanguardia ha publicado en su edición de hoy un problema desconocido hasta la fecha y triste para un club histórico y con tanta tradición de baloncesta. El Bàsquet Manresa deberá buscar soluciones para arreglar un problema económico que tiene si no quiere desaparecer.
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La situación deportiva no es como lo de antaño y no ayuda en absoluto. Actualmente es penúltimo en la clasificación y vio como perdió su patrocinador (Assignia) en Navidades. Esta noticia aparece pocos días después de conocerse las graves lesiones de Javi Rodríguez y Charles Ramsdell, dos jugadores imprescindibles.
Todo este panorama hace difícil que los del Bages puedan mantener la categoría e incluso el club. No obstante, en momentos difíciles, la cabeza tiene que estar fría y hay que actuar con cabeza para demostrar que nada es imposible.
El 40 es el número por excelencia actualmente en Manresa. 40 son los años que lleva el club en la élite. 40.000 euros son los que hay recaudar para evitar la desaparición y 40 son los días que tiene de margen el club.
Las arcas del club están vacías. Fichar es casi imposible, pero la categoría hay que salvarla y Ferran Laviña jugará para aportar su granito de arena en la cancha. El club ha pedido, a través de las redes sociales y su página web, que la gente colabore donando un mínimo de 10 euros. Es lo que se conoce como micromecenazgo.