En la mejor liga del mundo no se andan con rodeos. El respeto hacia los árbitros es máximo y quien lo incumpla, deberá pagar por ello. Son humanos y pueden equivocarse, ese es el argumento del comisionado de la Liga. La NBA ha multado con 25.000 dólares al entrenador de los Cavaliers por las declaraciones postpartido del pasado viernes frente a los Wolves.
Byron Scott criticó la actuación de los árbitros al término del encuentro (perdido): “Estoy tratando de decir esto sin ser multado, pero es que fue tan malo el arbitraje… realmente lo fue.”
No debe ayudar este acto a calmar los ánimos en el equipo de Ohio, que acumula un triste balance de 4 victorias frente a 17 derrotas desde que empezó la temporada, acusando las bajas puntuales de Kyrie Irving y Dion Waiters, y pese a la progresión estelar de Varejao.
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