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Como ya lo dijimos en el artículo de esta semana de lo que le esperaba al
Blancos de Rueda Valladolid esta semana, Málaga siempre había sido donde el
equipo pucelano se llevaba un saco todas las temporadas, y desgraciadamente,
esta no podía ser la excepción.
Y es que la imagen que vimos todos en Barcelona, se empieza a difuminar mas
que el gas natural.
Pero analicemos el partido, el primer cuarto ya se intuía lo que podría
pasar, con Unicaja mas enchufado y el Blancos de Rueda viéndolas ver. Empezó
fuerte, pero Hunter, que no había aparecido las dos primeras jornadas por lesión,
empezó a recortar diferencias con el conjunto malagueño. Aun así, Unicaja se
estiro para llegar al final del primer cuarto con un 20-15 a favor de Unicaja.
El segundo cuarto puso la maquina a funcionar Unicaja, tirados de un gran
Fran Vazquez y Zoric. Hunter desapareció en este segundo cuarto, cosa que
aprovecho el conjunto malaguista para estirar diferencias hasta llegar a 13
puntos, aunque el cuarto terminaría con 39-28.
El tercer cuarto fue la tumba del conjunto pucelano. Cuando se esperaba una reacción
de este, Unicaja aprovecho para dar el hachazo definitivo al partido con un
parcial de inicio de 11-2, volviendo estar Fran Vázquez y Zoric como pedro por
su casa. El resultado al final de este tercer cuarto fue de 60-42, dejando el
partido totalmente sentenciado.
Pero en el último cuarto, al conjunto pucelano le dio directamente por tomárselo
como 10 minutos de entrenamiento, sin intensidad ni ganas. Cosa que claro esta,
aprovecho el Unicaja de Málaga para darle una alegría a su afición, aumentado
diferencias hasta llegar al resultado final de 79-55, 26 puntos de diferencia.
Unicaja, sin hacer nada del otro mundo, se llevaba una victoria para
reforzar la moral afrontando la
Euroliga y Blancos de Rueda, a pensar que el crédito de
Barcelona esta mas que agotado y empezar a espabilar de verdad.
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