
El partido empezó con un ritmo ofensivo horrible, ninguno de los equipos conseguía anotar, ya fuera por la defensa rival, por el miedo o por lo patoso. Ambos equipos solo pudieron sumar 6 puntos al final de los 5 primeros minutos, 4-2. A partir de ahi Earl Clarck se puso las pilas y anotó 3 canastas seguidas y que seguido de un triple de Lenzyl y un tiro libe de Mensah Bonsu sumaban 12 puntos y la selección canarinha no sumaba en anotación y desde el minuto 6'38 del partido no volvió a anotar. Gran Bretaña se iba al banquillo satisfecha con el 12 a 4 que les habían endosado a los brasileños en los primeros 10 minutos.
En el segundo cuarto Brasil despertó y dirigidos por un magnífico Marcelinho Huertas empezaban a remontar el partido. Thiago Splitter estaba jugando a un gran nivel y sumando mucho en ataque, pero en defensa se veía superado casi siempre por Mensah Bonsu que mantenía a los suyos en el partido.
La anotación era mucho mas elevada que en el primer cuarto y Brasil multiplico por 6 su anotación el el primero y acabó el cuarto con un 27-27 que dejaba el partido a decidirse en la segunda mitad.
Gran Bretaña salió muy enchufada de vuelta al partido y con un enorme Reinking que anotó los 8 primeros puntos se ponían por delante en los primeros instantes. Pero poco duró la alegría porque el dúo ex-baskonista formado por Marcelinho y Splitter ahogaba a los británicos que veían que la diferencia iba reduciéndose y al final del cuarto ya perdían por 4 puntos.
En Gran Bretaña otra vez Clarck y Reinking volvieron a sobresalir para poner a Gran Bretaña 2 puntos arriba en el marcador. Pero en ese momento volvió el dúo de la canarinha que destrozó a Gran Bretaña, Marcelinho asistiendo (8asistencias) y Splitter anotando (21 tantos) dejaron a los británicos sin opciones en los últimos minutos y Brasil acabó ganando el partido.
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