Bronce para una Generación de Oro (88-89)

La mejor hornada de jugadores de la historia del baloncesto español rubricó con un bronce una trayectoria envidiable y que jamás olvidaremos los amantes del baloncesto, y en especial, los españoles, tras imponerse por un punto (88-89) a una luchadora Australia.

Foto vía FIBA

"Es imposible no estar con estos tíos" escuchaba estos días tras recuperarse de un mal inicio de torneo. Y es que no olvidemos que estuvimos a nada de no pasar ni a Cuartos de Final, pero una vez más, estos jugadores siempre se proponen sorprendernos, y cuando creemos que ya no pueden más dar de sí se sobreponen a las adversidades hasta llegar a un bronce olímpico que para muchos sabe a oro.

Como se preveía no fue un partido fácil ni mucho menos. Los australianos venían tocados en su orgullo tras ser apalizados en semifinales por Serbia e iban a luchar con todo para ganar esa medalla. Tras un inicio igualado en el primer cuarto, en el que un excelso Pau Gasol (31 puntos y 11 rebotes) y Nikola Mirotic sostenían en ataque al equipo español; por parte de Australia, un Patty Mills acertadísimo en el tiro no dejaba escapar al equipo de Sergio Scariolo.

Tras un amago de huída de España en el segundo cuarto, en el que se llegó a poner 12 arriba (28-40), de nuevo Mills y una gran intensidad defensiva harían que los 'ausies' llegaran al descanso perdiendo únicamente por 2 puntos.

El resto del partido fue un intercambio de golpes para el disfrute del aficionado al baloncesto. Pau Gasol seguía imponiendo su poder en la zona, y más tras la eliminación por faltas de Andrew Bogut al comienzo del tercer cuarto. Pero él solo no podría ganar ese bronce tan deseado, por lo que Sergio Rodríguez asumió el mando en ataque superando sin ninguna duda en el día de hoy a un Dellavedova que no realizó su mejor partido. Patty Mills seguía a lo suyo, con una inestimable ayuda de Motum que apareció en un momento del partido importante para su equipo para llegar a poner arriba incluso al equipo de Oceanía.

Pero el mejor jugador de la historia del baloncesto español no quería irse de, posiblemente, sus últimos JJOO sin una medalla que, si ya no era gloriosa, pondría el broche definitivo a un palmarés que será muy difícil superar para futuros jugadores españoles. Gasol apareció, y el Chacho le secundó para que España se llevará su cuarta medalla olímpica de su historia, pero la primera que gana (las otras tres fueron plata).

Posiblemente no volveremos a ver en este país a un grupo de jugadores tan buenos y competitivos como estos, y por supuesto, a un jugador que se ha ganado ser recordado por lo que resta de vida. Una leyenda como Pau Gasol que siempre tiró de un grupo al que Europa y el resto del mundo respetarán siempre.