Y lo que se perfilaba como el gran bombazo del verano ya ha estallado. 4 de Julio, el día de la independencia en los Estados Unidos, ha sido el día elegido por Kevin Durant para dar a conocer su futuro. Deja Oklahoma para poner rumbo a la Bahía de San Francisco y unirse al equipo de moda.
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| Imagen vía davidsantana.sportsblog.com |
Y Kevin Durant deshojó la margarita. Después de quedarse con OKC, Boston y los Warriors como sus destinos más probables, Durant eligió el medio The Players' tribune para, a eso de las 11:30 de la mañana en Estados Unidos, hacer estallar la noticia. Se une a Stephen Curry, Klay Thomson y Draymond Green para juntar un quinteto de ensueño con el que poder alcanzar el que sería su primer anillo en la NBA.
Después del récord de 73-9, y de haber caído con estrépito en las finales de la NBA, los Warriors pegan un golpe de efecto a la liga fichando al agente libre más cotizado del verano. Esta decisión puede significar un antes y un después en la NBA, ya que podemos estar ante el comienzo de una auténtica dinastía en Oakland. Ya lo dice el dicho, si no puedes con tu enemigo únete a él, y después de ver cómo le remontaban un 3-1 en las finales de conferencia, Killer D se pondrá el año que viene a las órdenes de Steve Kerr.
La bomba ha estallado, ahora se espera el efecto dominó. Wade y Pau parecían estar a la espera de esta decisión para tomar la suya propia, así que en las próximas horas se aclarará también el futuro de ambos jugadores. Lo que si está claro es que la liga no volverá a ser la misma después de este día.
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