"También se hizo una encuesta con Del Bosque en la que salía que había que echarlo. Cuando estás enfadado hablas y lo mismo 10 minutos antes piensas lo contrario. Lo que sí es cierto es que el partido se perdió y no salió bien". Esta es la frase que más se puede destacar en una entrevista en la que Orenga defiende su criticada actuación en el actual Mundobasket.
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| Foto: MARCA |
Según el seleccionador nacional, no es el momento de dimitir, es el momento de recapacitar sobre el mundial y dejar la pelota sobre el tejado de la federación respecto al tema de su salida: "Hay que dejar que la Federación piense y se aclare. La percepción cambia porque estamos molestos, dolidos, pero el trabajo previo es el mismo que si hubiéramos ganado. Hay que analizar si el trabajo es el correcto y si la vía que llevamos es la idónea".
El seleccionador se ve motivado como para continuar hasta la siguiente competición, el Eurobasketl y asegura estar cabreado y fastidiado por la derrota contra Francia.
Sobre el partido con francia, ha dicho: "Le he dado muchas vueltas al partido y se las daré. En los primeros encuentros hicimos un juego bonito y brillante y el séptimo partido no fuimos capaces de lograrlo. Hay que analizarlo bien y ver porque no funcionó lo mismo que los otros días. En la previa analizamos muy bien a Francia, que jugó un gran choque. Fue un mal partido en modo colectivo, de todos los jugadores y yo incluido".
Al ser cuestionado sobre el papel de Felipe en el último partido, donde no jugó, Orenga se basó en las actuaciones anteriores, donde los tres pivots referentes habían acaparado casi todos los minutos en pista. También ha comentado el posible factor negativo que pudieron tener los cuatro días de descanso.
Uno de los aspectos mas cuestionados sobre el seleccionador, fue su jerarquía en el equipo, y el seleccionador también tenía respuestas para esto: "Los jugadores tienen mucho talento, no mucho poder. Ellos son los que nos han llevado a tener estos éxitos y son como una gran familia. Dentro del grupo se llevan bien y no tienen más poder que el seleccionador".
Para acabar, Orenga da esperanza a los españoles, asegurando que no es el fin de esta generación que tantos títulos ha logrado, y afirma, con toda seguridad, que al final del partido, nadie mencionó que era el fin de esta selección española y que les quedan mucho camino por recorrer.
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