¡El Real Madrid, a la Final Four de Milan! Los blancos lo lograron en el quinto partido ante un Olympiacos, de nuevo, guerrero hasta el final. Sergio Llull, Felipe Reyes y Rudy Fernández fueron los líderes de un Madrid que supo jugar mejor sus opciones y que dominó el rebote ofensivo. Spanoulis no encontró en Dunston a su escudero, y las posibilidades griegas se vieron reducidas. Los merengues se plantan en Milan como grandes favoritos al título.
Partido para grandes jugadores. Así empezaba el choque, con tensión, con garra, con energía. El Madrid pronto comenzaba a dominar, gracias a un Llull muy metido en el juego y a los lanzamientos tanto del menorquín como de Mirotic, aunque los griegos, como era de esperar, no se lo ponían nada fácil a los blancos.
Los lanzamientos exteriores de Lojeski y de Spanoulis igualaban las tornas. Sin embargo, el dominio del rebote por parte de Bourousis y Darden propiciaban varias contras del Madrid para llegar al final del primer periodo con un resultado de 18-12.
En el segundo cuarto, la salida del Chacho le imprimía magia al juego merengue. Los de Laso, defendiendo a gran nivel, lograban despegarse hasta un +13 que levantaba al público de sus asientos, pero la picardía griega, de la mano de Spanoulis, aparecía una vez más para silenciar al Palacio.
Los puntos del 7 heleno y las salidas de tono de los jugadores del Madrid, sumado a una técnica a Laso, daban riendas a una pequeña reacción visitante, marchándose ambos equipos al vestuario con un apretado 40-34.
El rebote ofensivo y el juego interior. Claves de Laso para el inicio del tercer cuarto. Gracias a Bourousis y Mirotic, los blancos se mantenían por delante con cierta comodidad, muy hipotética, ya que Olympiacos, sacando fuerzas de la nada, siempre recuperaba terreno. Y así hasta el último periodo.
Spanoulis, Spanoulis, Spanoulis. Receta de Bartzokas para intentar llevarse el triunfo. Pero Spanoulis no pudo por sí solo, ya que jugadores como Dunston estuvieron totalmente desaparecidos. El Madrid, ganando cada rebote en ataque, logró distanciarse con un colosal Felipe Reyes, que se convertía en el factor clave del triunfo con su lucha bajo los aros. Spanoulis trataba de tirar de los suyos, pero ya no quedaban opciones. Llull sentenciaba con un triplazo desde la esquina y el Real Madrid se planta en la Final Four de la Euroleague. Victoria por 83-69 que cierra una magnífica serie de baloncesto entre un enorme Olympiacos, que a pesar de perder a medio equipo el verano pasado, ha sabido luchar ante todo un Real Madrid hasta el final. Los blancos, ahora sí, a alcanzar la gloria en Milan, donde espera el de siempre, el Barcelona.
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| Foto: Euroleague |
Partido para grandes jugadores. Así empezaba el choque, con tensión, con garra, con energía. El Madrid pronto comenzaba a dominar, gracias a un Llull muy metido en el juego y a los lanzamientos tanto del menorquín como de Mirotic, aunque los griegos, como era de esperar, no se lo ponían nada fácil a los blancos.
Los lanzamientos exteriores de Lojeski y de Spanoulis igualaban las tornas. Sin embargo, el dominio del rebote por parte de Bourousis y Darden propiciaban varias contras del Madrid para llegar al final del primer periodo con un resultado de 18-12.
En el segundo cuarto, la salida del Chacho le imprimía magia al juego merengue. Los de Laso, defendiendo a gran nivel, lograban despegarse hasta un +13 que levantaba al público de sus asientos, pero la picardía griega, de la mano de Spanoulis, aparecía una vez más para silenciar al Palacio.
Los puntos del 7 heleno y las salidas de tono de los jugadores del Madrid, sumado a una técnica a Laso, daban riendas a una pequeña reacción visitante, marchándose ambos equipos al vestuario con un apretado 40-34.
El rebote ofensivo y el juego interior. Claves de Laso para el inicio del tercer cuarto. Gracias a Bourousis y Mirotic, los blancos se mantenían por delante con cierta comodidad, muy hipotética, ya que Olympiacos, sacando fuerzas de la nada, siempre recuperaba terreno. Y así hasta el último periodo.
Spanoulis, Spanoulis, Spanoulis. Receta de Bartzokas para intentar llevarse el triunfo. Pero Spanoulis no pudo por sí solo, ya que jugadores como Dunston estuvieron totalmente desaparecidos. El Madrid, ganando cada rebote en ataque, logró distanciarse con un colosal Felipe Reyes, que se convertía en el factor clave del triunfo con su lucha bajo los aros. Spanoulis trataba de tirar de los suyos, pero ya no quedaban opciones. Llull sentenciaba con un triplazo desde la esquina y el Real Madrid se planta en la Final Four de la Euroleague. Victoria por 83-69 que cierra una magnífica serie de baloncesto entre un enorme Olympiacos, que a pesar de perder a medio equipo el verano pasado, ha sabido luchar ante todo un Real Madrid hasta el final. Los blancos, ahora sí, a alcanzar la gloria en Milan, donde espera el de siempre, el Barcelona.
Ficha técnica: Previamente a la disputa del partido, se guardó un minuto de silencio en recuerdo a Tito Vilanova en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid.
Real Madrid (18+22+19+24): Llull (20), Rudy Fernández (15), Darden (6), Mirotic (10), Bourousis (8) - Sergio Rodríguez (8), Díez (-), Barreiro (-), Slaugher (1), Mejri (-), Felipe Reyes (15), Carroll (-)
Real Madrid (18+22+19+24): Llull (20), Rudy Fernández (15), Darden (6), Mirotic (10), Bourousis (8) - Sergio Rodríguez (8), Díez (-), Barreiro (-), Slaugher (1), Mejri (-), Felipe Reyes (15), Carroll (-)
Olympiacos (12+22+18+17): Spanoulis (19), Mantzaris (2), Lojeski (15), Petway (9), Dunston (4) - Sloukas (3), Simmons (7), Shermadini (-), Collins (3), Printezis (4), Perperoglou (-), Papapetrou (3)
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