Las finales de la temporada pasada demostraron que en la NBA se necesitan muchos factores. No vale tener al mejor de la liga, al mejor escudero y a uno de los mejores jugadores interiores. El banquillo es fundamental para conquistar el anillo y el acierto de los jugadores de la segunda unidad se antoja de nuevo vital para que los Heat repitan éxito. El perímetro de los de Spoelstra puede ser letal si San Antonio se centra en exceso a frenar las penetraciones de Lebron James.
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| Foto: tumblr.com |
A lo largo de la temporada, los Heat han vuelto a demostrar su potencial desde la línea de tres. Son uno de los equipos con mejores porcentajes desde el exterior y la afluencia de defensores que atrae Lebron James con su capacidad de abrir a las bandas permite a los de Florida sumar de tres en tres. Además de la capacidad de Bosh, Wade y Lebron de anotar desde esa posición, Miami tiene sus bazas con jugadores muy efectivos.
A principios de campaña, Pat Riley decidió añadir a un equipo campeón la experiencia y el talento de Ray Allen, el mejor triplista de toda la historia y Rashard Lewis, un magnífico tirador que, sin embargo, ha sido muy irregular durante la temporada. El ex de los Celtics ha demostrado tener piernas para partidos importantes y es uno de los mejores sextos hombres de la NBA con su nuevo rol.
Shane Battier no solo sigue siendo un defensor duro, sino que desde antaño se ha destapado como un tirador fiable gracias a los espacios que consigue con los pases de Lebron. Frente a los Thunder al año pasado fue uno de los mejores y quiere conseguir su segundo anillo. Otro ex Grizzlie y que ha sido clave frente a los Pacers ha sido Mike Miller, que parece haber recuperado su pólvora y vuelve a mostrarse infalible desde los triples.
Finalmente, Mario Chalmers y Norris Cole buscarán ser otra opción más para conquistar el segundo anillo consecutivo y el tercero en la historia de Miami. Chalmers sigue creando dudas, pero este año ha sido fiable desde la línea de tres y ha acabado partidos hasta con 8 triples anotados. Norris Cole, con una mejora considerable en este tramo final, está con mucha confianza y puede dar minutos de calidad.
Los Spurs tendrán que defender los bombardeos de los Heat desde el triple.
A principios de campaña, Pat Riley decidió añadir a un equipo campeón la experiencia y el talento de Ray Allen, el mejor triplista de toda la historia y Rashard Lewis, un magnífico tirador que, sin embargo, ha sido muy irregular durante la temporada. El ex de los Celtics ha demostrado tener piernas para partidos importantes y es uno de los mejores sextos hombres de la NBA con su nuevo rol.
Shane Battier no solo sigue siendo un defensor duro, sino que desde antaño se ha destapado como un tirador fiable gracias a los espacios que consigue con los pases de Lebron. Frente a los Thunder al año pasado fue uno de los mejores y quiere conseguir su segundo anillo. Otro ex Grizzlie y que ha sido clave frente a los Pacers ha sido Mike Miller, que parece haber recuperado su pólvora y vuelve a mostrarse infalible desde los triples.
Finalmente, Mario Chalmers y Norris Cole buscarán ser otra opción más para conquistar el segundo anillo consecutivo y el tercero en la historia de Miami. Chalmers sigue creando dudas, pero este año ha sido fiable desde la línea de tres y ha acabado partidos hasta con 8 triples anotados. Norris Cole, con una mejora considerable en este tramo final, está con mucha confianza y puede dar minutos de calidad.
Los Spurs tendrán que defender los bombardeos de los Heat desde el triple.
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