El proceso para que Seattle vuelva a tener un equipo de NBA parece irreversible. Más aún ante la ilusión de Steve Ballmer, Presidente de Microsoft y uno de los inversores que quiere comprar los Kings y devolver a Seattle los Supersonics.
Este lunes será decisivo para saber si Ballmer y Hansen, el otro inversor, deciden finalmente dar un paso al frente, obligar a Sacramento a vender y hacer el traslado hacia Seattle. Así pues, el lunes se decide la historia de la franquicia de Sacramento.
“Hoy se trata de una ventaja. Me gustaría decir que tenemos los dedos cruzados. Hansen ha trabajado muy duro y muy inteligentemente. Seattle tiene una gran oferta. Tenemos un gran plan para un estadio. Creo que tenemos el mejor plan para un estadio. Además tenemos una buena oferta que ha sido aceptada por los actuales propietarios. Parece que nunca habrá una mejor oportunidad. Pero serán los dueños de la NBA los que decidan”, explicaba Ballmer a Associated Press.
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