Esta madrugada hemos vuelto a revivir las Finales de la temporada pasada. Thunder vs Miami. Durant vs Lebron. Un duelo apasionante que auguraba igualdad y un emoción. Ha existido hasta que Lebron ha querido. El Rey ha vuelto a hacer un partido de extraterrestre y confirma que es el máximo candidato al MVP. Durant, con un último cuarto increíble, no ha podido evitar la derrota por 100-110.
Foto: nba.com |
El partido en si volvió a tener un nombre que destacó por encima de todos los demás. Lebron James demostró que no es humano. El de Akron está haciendo números que no firmaba Jordan a esta edad y terminó el choque con 39 puntos, 12 rebotes, 7 asistencias y 2 robos con 14/24 en tiros de campo. El 58% de efectividad en los lanzamientos le impidió sumar su séptimo partido consecutivo con más de 30 puntos y más del 60% de acierto.
Pero Miami volvió a demostrar que tiene más armas que la de Lebron James. Chris Bosh se acercó a ese jugador estrella de Toronto y se fue hasta los 20 puntos y 12 rebotes, mientras que Wade estuvo menos acertado en ataque (13 puntos) pero repartió 8 asistencias. Allen, des del banquillo, aportó 13 puntos.
Oklahoma volvió a demostrar que sin Harden el banquillo no anota tanto como con la barba y que Ibaka no genera tantos tiros si no le llegan balones. Tras una primera parte horrorosa en la que falló los 7 tiros que intentó, Durant consiguió irse hasta los 40 puntos (22 en en último cuarto), 8 rebotes, 4 asistencias y 3 tapones, pero no pudo evitar la derrota.
Tan solo Russell Westbrook le acompañó y terminó con 26 puntos y 10 asistencias, aunque perdiendo 6 veces el balón.