Houston Rockets no acaba de encontrar la regularidad deseada y Jeremy Lin no es ese base explosivo que triunfó en la primera quincena de marzo en Nueva York. Los Rockets quieren apuntalar su "backcourt" y han preguntado por Danny Granger.
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La situación de Granger en los Pacers no es la idónea. La mejora de Paul George y la constancia de David West han hecho que Indiana se olvide de él y de la importancia del que hasta ahora era el jugador franquicia. Con George en el All-Star, los Pacers no les importaría desprenderse de su figura, que tiene un salario elevado.
Granger, de 29 años, sufre una tendinitis rotuliana y aún no ha debutado. Durante la pasada temporada promedió 18.7 puntos, 5 rebotes, 1.8 asistencias y un robo en 33.3 minutos.