El Real Madrid se llevó la primera semifinal de la Supercopa Endesa tras derrotar al Valencia Basket en un partido que se decidió en los últimos minutos. Aunque los de Perasovic dominaron en la primera mitad, Rudy y Llull le dieron la vuelta al partido a base de triples. Los blancos defenderán su corona este sábado.
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| Foto: ACB Media |
Los primeros compases del partido tuvieron un claro color: el taronja. Los de Perasovic comenzaron más duros en defensa y buscando la opción más clara en ataque. Van Rossom y Lucic lideraban la ofensiva de Valencia, solo contrarrestada con los fade-away de Rudy. La falta de rodaje de los blancos se notaba ante un equipo mucho más cohesionado (6-13, min 4).
KC Rivers y Llull intentaban mantener a los de Laso en el partido, pero Valencia llevaba con claridad el tempo. Loncar y Lishchuk controlaban el rebote con claridad y Sato salía desde el banquillo para cerrar un primer cuarto muy sólido de Valencia (19-26).
Reacción blanca
El Madrid tenía que reaccionar para revertir una inercia negativa y con Llull, Maciulis y Nocioni en pista, la defensa del perímetro mejoró mucho. Mejri aportaba intensidad en la pintura y los de Laso igualaron la contienda (31-31).
Valencia no aguantaba el ritmo defensivo y el cansancio se empezaba a notar en los tiros fallados. La primera mitad terminaba con un alley-oop espectacular de Lucic respondido con un triple en la bocina de Nocioni (43-43).
Ayón, 4 minutos y al banco
El mexicano hizo su debut con el Real Madrid nada más comenzar el segundo cuarto, pero duró poco. En apenas 4 minutos cometió 3 faltas y tuvo que sentarse de nuevo en el banquillo ante la cara de incredulidad de Pablo Laso.
Entra el Chacho, el Madrid funciona
Durante la primera mitad no se pudo ver a Sergio Rodríguez. El canario, aquejado todavía por la afección de tiroides que le ha tenido de baja estas últimas semanas, salió de cara tras el descanso y en cinco minutos lideró una exhibición blanca con Rudy en modo fusilador desde la línea de tres (56-49, min 25). Perasovic paraba el partido ante la imprecisión de los suyos.
El marcador se estancaba en los últimos compases del tercer cuarto fruto de un constante correcalles y errores de cara a canasta. Las faltas seguían siendo protagonistas y se llegaba al último cuarto con mucha igualdad y todo por decidir (60-58).
Final de infarto
El Buesa Arena se empezó a entonar y se posicionó del lado taronja. Van Rossom anotaba un triple nada más comenzar el último cuarto y Valencia recuperaba la iniciativa en el marcador. Empezaba un toma y daca que divertía al público y mantenía la igualdad hasta el final. Llull disparaba y Loncar respondía (72-72, min 36).
Se desinfló Valencia en los últimos compases y Rudy desde la línea de tres y Felipe Reyes, siempre aportando, sentenciaron en favor de los de Pablo Laso ante un Perasovic abatido y cabizbajo.
La primera parte fue para el Valencia pero en la segunda el Madrid fue mejor y supo jugar los minutos decisivos con más cabeza y acierto.
Se desinfló Valencia en los últimos compases y Rudy desde la línea de tres y Felipe Reyes, siempre aportando, sentenciaron en favor de los de Pablo Laso ante un Perasovic abatido y cabizbajo.
La primera parte fue para el Valencia pero en la segunda el Madrid fue mejor y supo jugar los minutos decisivos con más cabeza y acierto.
El mate de Lucic
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