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jueves, 26 de diciembre de 2013

Jaycee Carroll también es capaz de soñar con la NBA

El escolta del Real Madrid, que renovó su contrato la pasada temporada y seguirá vinculado al club durante unos cuantos años más, reconoce que la NBA es un sueño para todo jugador y más cuando uno es americano.

Foto: Gigantes

Jaycee Carroll ha concedido una entrevista a The Bleach Report en la que habla de su trayectoria y de sus sensaciones como jugador de baloncesto en el Real Madrid. El americano reconoce estar feliz en Madrid, pero una parte de él admite el sueño de jugar en la NBA: “no pienso acerca de ello diariamente, hay una parte de mí que tiene la idea en mi cabeza de volver a casa y jugar al baloncesto”.

Carroll ejemplifica su sueño con jugadores que, tras muchos años en el baloncesto europeo, decidieron dar el salto de manera tardía a la mejor liga del mundo: “Pablo Prigioni, que juega para los Knicks ahora mismo. Él tiene 35, 36 años y apenas consiguió su primer trabajo en la NBA. Allí está Mirza Teletovic, que estaba aquí. Vitor Faverani, que estaba en nuestra Liga el pasado año. Ha estado jugando algunos grandes minutos con los Celtics. Gary Neal, que estuvo en los Spurs -ahora Milwaukee Bucks-. Jugué contra él en Italia y España. Promedié más puntos por partido que él”.

El jugador, que tiene contrato hasta 2018, analiza su paso por los campamentos de la NBA y por las ligas de verano: “no había una prisa enorme de los equipos NBA por ficharme. No daba el perfil del tamaño. Hice un workout con los Chicago Bulls y lo hice realmente bien. A partir de ahí, conseguí 12 con equipos por todo el país (...) “Le dije a mi agente: ‘Si alguien llama, dile que sí, Lo cogeré’. Pero la oferta nunca llegó. Los equipos europeos me vieron jugar en la Liga de Verano. Tuve una bonita oferta para ir a Italia a jugar y la cogí. Así es como acabé en Europa”.

“Ha sido divertido y emocionante conseguir hacerse un nombre en Europa. Tuve un buen año en Italia. Fiché en España. Estaba emocionado. Conocía el lenguaje, iba a una isla, que parecía fantástica, y tenía dos años de contrato. Tuve un gran primer año siendo el líder en anotación. Mi equipo llegó a los playoffs y tenía un entrenador al que le gustaba”, asegura el cañonero madridista. Tras ser líder en anotación en Gran Canaria durante su primer año, Carroll se mostró sorprendido al no recibir ofertas de equipos más grandes: “me sorprendió que después de esta temporada no tuve ningún interés de un equipo más grande. Y me sentía frustrado. Estaba feliz donde estaba pero trataba de subir la escalera. Probé en la Liga de Verano. Después volví a Gran Canaria y tuve otro gran año. Conseguimos clasificarnos para la Copa del Rey. Eso es en realidad es lo que cambió todo para mí. En el primer partido jugamos contra el Real Madrid. Hice 30 puntos. Ese partido cambió todo para mi. Después de eso tuve a muchos equipos llamando a la puerta. El Barcelona estaba interesado, el Madrid, obviamente”.

De su experiencia como misionero, Carroll reconoce que le ayudo “tremendamente para ir a jugar a Europa. Ya había tenido mi primera experiencia fuera de casa. Ser capaz de hablar en español me ayudó en mi segundo trabajo en Gran Canaria, España”.

¿Conseguirá Carroll el sueño de jugar en la NBA alguna vez? ¿Continuará en Europa hasta el día de su retirada? Lo único seguro es que le quedan 4 años de contrato por delante con el Real Madrid, y de seguir siendo el jugador que es hoy, seguro que en el seno del club madridista desearán que nunca se marche de vuelta a su país.

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